Un veterano del Ejército de Estados Unidos, que fue arrestado la semana pasada durante una redada migratoria en una granja de mariguana en el sur de California, declaró el miércoles 16 de julio que agentes federales lo agredieron para después detenerlo.
George Retes, de 25 años de edad y guardia de seguridad en Glass House Farms en Camarillo, narró que iba llegando al trabajo el 10 de julio cuando varios elementos rodearon su automóvil y, a pesar de que se identificó como ciudadano estadunidense, rompieron su ventanilla, le rociaron gas lacrimógeno y lo sacaron a la fuerza, y tras someterlo, fue detenido.

"Fueron necesarios dos agentes para inmovilizarme por la espalda y luego uno en el cuello para arrestarme, pese a que mis manos ya estaban detrás de la espalda", expresó Retes.
Redadas masivas derivaron en la detención de cientos de personas
El nacido en Ventura City fue detenido durante redadas caóticas en dos granjas del sur de California, donde las autoridades federales arrestaron a más de 360 personas, uno de los mayores operativos desde que el presidente Donald Trump asumió el cargo en enero. Los manifestantes se enfrentaron a agentes que portaban equipo de estilo militar, y un trabajador agrícola murió tras caer del techo de un invernadero.
Las redadas ocurrieron tras un mes de intensificación en la represión migratoria por parte del gobierno de Trump en todo el sur de California, que en un principio se centró en Los Ángeles, donde funcionarios locales dicen que las acciones federales están sembrando miedo en las comunidades de inmigrantes.
El gobernador de California, Gavin Newsom, habló sobre las redadas en una conferencia de prensa el miércoles, calificando a Trump de ser un "agente del caos" que ha incitado a la violencia y ha sembrado el miedo en las comunidades.
"Alguien cayó 9 metros porque estaba muerto de miedo y perdió la vida", señaló, refiriéndose al trabajador agrícola que murió en las redadas. "La gente está literalmente desapareciendo sin el debido proceso, sin derechos".
Kids running from tear gas, crying on the phone because their mother was just taken from the fields.
— Gavin Newsom (@GavinNewsom) July 11, 2025
Trump calls me “Newscum” — but he’s the real scum. pic.twitter.com/fj0l25mRBN
¿Qué pasó con el afectado?
Retes fue llevado al Centro de Detención Metropolitano en el centro de Los Ángeles, donde dijo que lo pusieron en una celda especial bajo supervisión por posible suicidio y lo revisaron cada día después de que se sintiera emocionalmente angustiado por su experiencia y por perderse la fiesta de cumpleaños de su hija de 3 años el sábado.
Indicó que los agentes federales nunca le dijeron por qué fue arrestado ni le permitieron contactar a un abogado ni a su familia durante los tres días que estuvo detenido. Las autoridades nunca le permitieron ducharse ni cambiarse de ropa a pesar de estar cubierto de gas lacrimógeno, agregó Retes, y señaló que sus manos le ardieron durante toda la primera noche que pasó bajo custodia.
El domingo, un agente le hizo firmar un papel y lo sacó del centro de detención. Dijo que le informaron que no había cargos en su contra.
Cuando solicitó una explicación, Retes recibió silencio:
"No me dieron nada que pudiera comprender", señaló Retes, quién explicó que recibió silencio al salir cuando preguntó por qué estuvo "encerrado durante tres días sin razón y sin cargos".
Tricia McLaughlin, subsecretaria de Seguridad Nacional, confirmó el arresto de Retes, pero no especificó bajo qué cargos.
"George Retes fue arrestado y ha sido liberado", manifestó. "No ha sido acusado. La fiscalía federal está revisando su caso, junto con decenas de otros, para posibles cargos federales relacionados con la ejecución de la orden de registro federal en Camarillo".
Un juez federal le ordenó el viernes al gobierno de Trump detener las detenciones y arrestos indiscriminados de inmigrantes sin órdenes judiciales en siete condados de California, incluido Los Ángeles. Activistas por los derechos de los inmigrantes acusaron a los agentes federales de detener a personas porque parecían hispanas.
El Departamento de Justicia apeló el lunes y solicitó que se suspendiera la orden.
El Pentágono también señaló el martes que ponía fin al despliegue de 2 mil efectivos de la Guardia Nacional en Los Ángeles. Eso es aproximadamente la mitad del número que el gobierno envió a la ciudad tras las protestas por las acciones de inmigración. Algunos de esos soldados han estado acompañando a agentes federales durante sus operaciones migratorias.
George Retes era veterano del Ejército
Retes indicó que ingresó al Ejército a los 18 años y estuvo en él durante cuatro años, incluido un despliegue en Irak en 2019.
"Ingresé al servicio para mejorarme a mí mismo. Lo hice porque amo este país. Somos una nación y, pase lo que pase, deberíamos estar juntos. Toda esta separación y rollo entre todo el mundo es simplemente la forma en la que no debería ser", comentó.
Además señaló que planea presentar una demanda por detención indebida.
"La forma en que están llevando a cabo todo este proceso de deportación es completamente incorrecta, persiguiendo a personas que sólo están trabajando, especialmente tratando de alimentar a todos aquí en Estados Unidos", expresó.
"Nadie merece ser tratado de la manera en que ellos tratan a las personas".
Retes indicó que fue arrestado junto con Jonathan Caravello, profesor de la Universidad Estatal de California, campus del Archipiélago del Norte, quien también es ciudadano estadunidense. Caravello fue arrestado por arrojarles una lata de gas lacrimógeno a los agentes federales, publicó el fiscal federal Bill Essayli en la red social X.
Professor Jonathan Caravello was not “kidnapped” by federal agents. He was arrested for throwing a tear gas canister at law enforcement. He is charged with a violation of 18 USC 111 and will have a court appearance tomorrow. https://t.co/QrIivjrthd
— U.S. Attorney Bill Essayli (@USAttyEssayli) July 13, 2025
La Asociación de Profesores de California indicó que Caravello fue detenido por agentes que no se identificaron ni le informaron por qué estaba siendo arrestado. Al igual que Retes, la asociación dijo que el profesor permaneció bajo arresto sin que se le permitiera contactar a su familia.
Caravello estaba intentando sacar un bote de gas lacrimógeno que estaba atascado debajo de la silla de ruedas de alguien, contaron testigos a la televisora KABC, la filial de la cadena ABC en Los Ángeles.
Un juez federal ordenó el lunes la liberación de Caravello bajo una fianza de 15 mil dólares. Su audiencia para ser encausado se llevará a cabo el 1 de agosto.
"Quiero que todos sepan lo que sucedió. Esto no sólo afecta a una persona", expresó Retes.
"No importa si tu piel es morena. No importa si eres blanco. No importa si eres un veterano (de las fuerzas armadas) o si sirves a este país. A ellos no les importa. Sólo están allí para cumplir una cuota", manifestó.
MD