Rondaron el sótano de la tabla, generaron dudas, cuestionamientos, pero el proyecto con Gabriel Milito se mantuvo firme y ahora las Chivas se mantienen con el futuro en sus manos, para entrar a Liguilla de forma directa.
Este domingo ante Pachuca, a partir de las 19:00 horas, el Rebaño buscará dar un gran paso rumbo a la calificación directa cuando visite el Estadio Hidalgo, para enfrentar a un rival directo en la pelea por ese sexto lugar, el último que da un pase sin escalas a los Cuartos de Final.
Repunte meteórico de los rojiblancos
Los dirigidos por Gabriel Milito llegaron a ser el 16 de la clasificación, pero llegan con un mejor presente, cinco triunfos en los últimos seis juegos y con las aspiraciones en sus manos, dependen de sí mismos.
En caso de ganar y que Tijuana pierda o empate, tendrán virtualmente amarrado su pase a falta una jornada por disputarse, ya que Juárez necesitaría golear a Querétaro para superarlos en diferencia de goles, pues actualmente los fronterizos tienen 0 en ese rubro y el Rebaño tiene un +4.
Por si eso no fuera suficiente, el Hidalgo le ha sentado bien al Rebaño, en sus últimas dos visitas han ganado, no pierden en esa cancha desde el Clausura 2022.
Los últimos dos torneos fueron una pesadilla para los rojiblancos, tres cuerpos técnicos desfilaron por el banquillo, pero no se logró meter a instancias finales, por lo que requieren volver a pelear en esos escenarios.
Partido de liguilla adelantada
La mala será la baja de Diego Campillo, una de las piezas con mayor impacto en fase defensiva y salida con balón, que podrían extrañarlo en lo que resta del certamen.
Los Tuzos de Jaime Lozano lideraron la tabla hasta la Jornada 5, pero la segunda mitad del campeonato no les ha sentado de buena forma, suman dos triunfos en los últimos seis juegos, llegan en el séptimo lugar.
El Guadalajara llega a la Bella Airosa con el delantero nacido en México en mejor forma, Armando González, suma 10 anotaciones y pelea por el campeonato de goleo.
Sus aspiraciones dependen de ellos, además de el envión anímico de haberse llevarse sus dos Clásicos, sin embargo llegó la hora de demostrar que van en serio.
OV