Justo cuando Cruz Azul le estaba pasando por encima a Toluca, vino una jugada que le dio vida a Toluca; en un contragolpe, Luis Romo estrelló el balón –ya sin portero– en el poste, en el contrarremate de Jonathan Rodríguez, la pelota le pegó al árbitro Óscar Macías, quien venía siguiendo el curso de la jugada, desviándola hacia afuera.
De un potencial 3-0, a los pocos minutos, los Diablos le empataron a La Máquina; sin embargo, para Juan Reynoso solo se trató de una jugada con muy mala suerte para el silbante.
“La verdad qué mala suerte para él y para nosotros, para él porque estaba haciendo un buen arbitraje, pero la gente quizá se quede con esa jugada; son accidentes, jugadas desafortunadas, lo lamentamos por nosotros y yo, que he seguido su carrera, lo lamento porque no es una situación normal que pase”.
Sin embargo, para Juan Reynoso, lo más rescatable del juego es que Cruz Azul mostró capacidad de reacción y que se supo sobreponer en lo mental, luego de esa acción polémica.
“Ha recuperado la memoria, en el sentido de que estamos muy claros de que esto va semana a semana; nos vamos contentos por el resultado, sobre todo por cómo se jugó y regresamos al segundo tiempo; ojalá no suframos como hoy, cuando nos empatan en tres minutos; son los desafíos y retos que hay, hoy se resolvió bien”.
También está contento porque tiene un plantel amplio que le permite resolver desde el banquillo, como fue con la entrada de Guillermo Fernández o de Rivero ante la lesión de última hora de Julio César Domínguez: “El grupo está enchufado, y el futbol nos está premiando porque nos da variantes. Vamos mejorando detalles. El miércoles decía que cada vez se le veía cosas distintas, hoy es la fortaleza mental, el no venirse abajo”.