Santa Claus es uno de los personajes más populares a nivel mundial y todo niño y adulto sabe que en temporada navideña, la figura del hombre bonachón, vestido de rojo y con una barba blanca que reparte regalos será inevitable. Pero en Europa no todo es felicidad; durante estas fechas, aparecen monstruos que golpean niños, hacen a los cerdos ser su transporte e incluso comen gente.
A continuación, algunos de los monstruos navideños más terroríficos que te hará repensar tu idea de Navidad.
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Krampus
Tal vez el más popular de los demonios navideños. Se cree que esta criatura de los alpes suizos se encarga de castigar a los niños que se portaron mal y ayudar a Santa en su labor. Tiene el cuerpo cubierto de pelo, patas de cabra y cuernos. Anuncia su llegada con ruidos de cadenas y lleva una canasta en la que pondrá a los niños mal portados para llevarlos al infierno con él y comérselos. Generalmente llega los primeros días de diciembre.
Frau Perchta
Esta bruja del folclore alemán deambula las calles entre el periodo de Navidad y Reyes en búsqueda de los niños bien portados. A ellos, les dejará una moneda de plata al día siguiente; de lo contrario, la bruja extrae el estómago y las tripas de los niños que se portaron mal y los rellena con paja y piedras.
Los hombres de la Navidad
Estos pequeños duendes originarios de Islandia, también conocidos como jólasveinarnir, llegan 13 días antes de la navidad y suelen hacer bromas ligeras como dejar papas podridas en los zapatos de los niños que se portaron mal hasta monstruos que devoran personas.
El gato de Navidad
Otro de los seres mágicos islandeses más populares es éste, a quien también se le llama Jólakötturinn. Pero no creas que el ser un gatito es una historia linda. Cuenta la leyenda que aquellos que no reciban como regalo alguna prenda de ropa nueva, serán la próxima comida del gato.
Kallikantzaros
Estos duendes malévolos son originarios de países como Grecia, Turquía y la región de los Balcanes y se cree que salen del interior de la tierra el día de Navidad y hasta el 6 de enero para hacer travesuras. La leyenda cuenta que pasan todo el año bajo tierra entrelanzando las raíces de los árboles para que estos colapsen junto con la Tierra, pero el día de Navidad hay una fuerza que los hace salir a la superficie y olvidar su trabajo.
Los Kallikantzaros no tienen una forma definida; mientras unos los describen con partes de animales, otros señalan que son diminutos y predominantemente machos.
mrf
