En la actualidad, los temas esotéricos han sido mejor aceptados por las personas, pues la apertura de mente es más notoria, o al menos eso es lo que menciona el dueño y chef de Los Alquimistas, un lugar que combina “la brujería” con el tema restaurantero.
Y justamente esto es lo que ha atraído a muchos a su local, que está ubicado en la colonia Roma, en donde podrás disfrutar de una rica comida mientras te leen el tarot.
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Los Alquimistas, una experiencia esotérica y gastronómica
Llegamos a Los Alquimistas con mucha curiosidad de conocer el lugar, pues en redes se ha hecho popular por mezclar temas esotéricos con la comida; incluso se menciona que los alimentos están “intencionados”.
Y sí, es una grata sorpresa cómo desde que entras la atmósfera te envuelve y te lleva a un mundo donde la magia y la alquimia están más presentes, por lo que el chef y dueño del lugar nos da la bienvenida con una gran sonrisa y con emoción nos explica más sobre este concepto.
“Peculiar. Es diferente. Bueno, es que a mí se me hace algo muy cotidiano. Yo creo que uno no dimensiona las cosas hasta que empiezas a ver la reacción de las personas. Muchas veces, por estar inmerso en otro tipo de circunstancias, no puedes ver exactamente cómo te perciben las personas. Para empezar, estar de frente del negocio, atendiendo a las personas y viendo las cuestiones esotéricas es bastante… a mí me gusta mucho porque es básicamente hacer todo lo que me gusta: desde la cocina, lo esotérico y el diseño editorial. Es conjugar todo lo que me gusta y llevarlo a la práctica.”
Sentados y con una taza de café fue que Javier Cano, quien es dueño y chef del lugar, nos habló un poco sobre él y cómo comenzó este amor por la cocina.
“Yo toda la vida he tenido las ganas de poner un restaurante y siempre he querido hacer algo diferente, algo que tenga que ver mucho con mi esencia y conjugar todo lo que me gusta. Mi mamá siempre estuvo en restaurantes y me fue inculcando y enseñando; ella tenía muchos recetarios y yo empezaba a cocinar solo. Posteriormente, lo primero que tuve fue el acercamiento con el tarot. Mi mamá se enojó y me dijo que era algo que en la familia siempre ha existido, pero quería que creciéramos alejados de eso. Después me empezó a enseñar las cosas que sabía y a pasar las recetas de la abuela y la bisabuela.”
Una tradición heredada, justo como una receta de cocina, fue lo que marcó a Javier y claramente a este lugar.
“Al ir aprendiendo, me di cuenta de que son ingredientes similares, tanto en brujería como en la comida, solo que cambia la intención. De ahí sale la idea de hacerlo diferente, entender la cocina como algo ritual, intencionar los ingredientes y, más adelante, ir aterrizando el concepto, el logotipo y el nombre, que tiene que ver con la espagiria.”
La comida intencionada y las lecturas del tarot
Los Alquimistas precisamente adoptan este nombre de esa práctica que se realizaba principalmente durante la Edad Media.
“La alquimia es un tema más universal y se asocia como la madre de la química, pero hay otra rama que tiene que ver con la alquimia espiritual. Somos lo que comemos; los ciclos naturales de la tierra son importantes, el comercio de temporada es importante y reunirnos en torno a la mesa también. Todo fue haciendo match. La primera herramienta que tenemos es nuestra propia mente. Hay una desconexión muy grande en algo tan sencillo como agradecer por la comida. De ahí surge la necesidad de intencionarla, preparar la comida de una forma distinta.”
Continúa mencionando que la magia no es buena ni mala, todo depende del para qué la utilices.
“La magia no tiene color, lo importante es la intención que tú le pones a lo que estás preparando. De ahí viene el principio del mentalismo: cómo trabajas con tu mente y cómo lo haces extensivo hacia los demás.”
Pero algo que también llama la atención de este establecimiento son las lecturas del tarot, aunque de estas nos menciona que es recomendable hacer cita previa a través de sus redes sociales, sobre todo por el espacio del lugar.
“Llevo 26 años interpretando el tarot y veo las sesiones como terapéuticas. No es solo un comensal, es una persona con necesidades. Siempre he hablado desde un punto de vista honesto. Hay cosas que no se pueden describir, forzosamente se tienen que vivir.”
Una estética y una experiencia
Sobre el lugar, ubicado en Av. Yucatán 28B, menciona que es algo que han cuidado mucho, señalando que fueron: "transformando el concepto dependiendo de la reacción de las personas. Siempre han cuidado la estética: no solo tiene que saber bien, también se tiene que ver bien y ser fotografiable. La comida es reinterpretar, integrar elementos y enriquecer.
Por último, y con gran satisfacción en el tono de su voz, nos comenta que este para él es un sueño que va cobrando forma.
“Lo describiría como un sueño que se está realizando. Siempre quise poner un restaurante, nunca visualicé cómo, y la vida me ha ido guiando. Me llegan las cosas que necesito: ingredientes, personas, recetas. Todo se va acomodando. Esa es parte de la magia.”
