La iglesia católica no queda exenta de la situación de violencia que priva en diversos estados del país y ejemplo de ello es la muerte de un sacerdote en Chiapas, por lo que la postura del gobierno federal de atraer el caso a través de la Fiscalía General de la República no resuelve, ni satisface cuando se vive en un estado de impunidad.
Así lo declaró el párroco Luis Martín Lugo Cervantes, de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe en Lerdo, quien refirió que a nivel de la Conferencia del Episcopado Mexicano se ha reprobado este asesinato, donde se ha confirmado que Chiapas no es la excepción en el alto índice de violencia que ha afectado a estructuras familiares y personas más vulnerables.
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“No es exclusivo de la iglesia que un hermano sacerdote haya padecido la muerte a manos del crimen, pues aunque no se sabe el móvil, es claro que la violencia está como un hecho”.
Violencia alcanza a la iglesia católica
Expuso como antecedente el tema que vivió un Obispo de Morelos donde fue privado de la libertad, así como de la muerte de sacerdotes jesuitas en Chihuahua, lo mismo que la desaparición de otros.
“Es claro que en el tema de la violencia es algo que nos ha superado y que sin duda alguna tenemos que poner manos a la obra, creando mayor conciencia y poniendo puntos de diálogo con las distintas estructuras de gobierno en los distintos niveles y con la participación de diversas agrupaciones de la sociedad civil”.
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dahh.
