Sólo mil migrantes centroamericanos se han mudado al nuevo albergue “El Baterral”, habilitado en Tijuana, Baja California, de los seis mil que han llegado al municipio.
Los migrantes fueron trasladados desde anoche, luego de que las lluvias afectaron el primer refugio de la Unidad Deportiva Benito Juárez.
Los hombres y mujeres tienen cuartos separados, mientras que para las familias hay cuartos sin paredes frontales.
Los migrantes indicaron que no todos quieren trasladarse al nuevo albergue, por el temor de ser deportados, debido a que algunas personas que se les acercaron ayer por la tarde.
“Le digo a mis paisanos que no tengan desconfianza, ‘El Barretal’, es una zona buena, está pavimentado afuera”, dijo Luis López, uno de los primeros en aceptar el traslado anoche.
“Siempre hay desconfianza, me entiendes”, añadió el nativo de San Pedro Sula, Honduras.
En el nuevo albergue aún no se instala la cocina de la Marina Armada de México y los migrantes piden alimentos, por lo que algunos optaron por salir a la calle y pedir alguna dádiva para comprar comida.
Las autoridades estatales y municipales anunciaron el cierre de todos los servicios en el primer refugio en la Unidad Deportiva Benito Juárez y reiteraron el llamado a los migrantes a irse al nuevo.
FLC