La Coordinación Estatal de la Agencia para Refugiados de la Organización de las Naciones Unidas (ACNUR), reconoció la apertura de la sociedad saltillense para integrar a familias foráneas en carentes condiciones en el ámbito laboral y educativo.
Ana Lorena Galindo Cepeda, coordinadora estatal de ACNUR, comentó que ha habido buena respuesta por parte de los empleadores, la comunidad y las instituciones educativas en las que se integraron los menores.
Los 45 refugiados son familias provenientes de Honduras y El Salvador, que han enfrentado la violencia generalizada que se vive en el denominado Triángulo Norte de Centroamérica.
[OBJECT]“Existe una violencia generalizada a causa de pandillas y maras, donde sufren extorsión, amenazas, reclutamiento forzado de sus hijos e hijas, que son los principales motivos que provocan el desplazamiento forzado”.
Destacó que las ofertas de empleo es otro de los factores que permiten que una familia se pueda integrar al programa y señaló que Saltillo cuenta con una amplia oferta laboral.
“No podemos definir un número en específico pero la posibilidad de que vengan más personas es bastante amplia, no estamos hablando de grandes agrupaciones, pero se están teniendo canalizaciones de conjuntos pequeños”.
Reconoció que fue una sorpresa gratificante para la ACNUR porque se tuvo respuesta favorable por parte del sector industrial, comercial y de servicios, para recibir a centroamericanos en condición de refugiados.
rcm