En respuesta a la reciente jornada violenta en la capital sinaloense, este martes arribaron 300 elementos del Ejército Mexicano para reforzar las labores de seguridad en la ciudad. Su llegada se da luego de intensos enfrentamientos en las zonas oriente y sur de Culiacán, que dejaron un saldo de tres personas sin vida y al menos nueve heridas.
Los militares, distribuidos en dos contingentes, ingresaron por vía terrestre como parte de una estrategia coordinada entre el gobierno federal y las autoridades estatales para contener la violencia. Su despliegue se suma a los operativos ya existentes en distintos puntos de la ciudad y el estado.
Además de las víctimas, los recientes enfrentamientos derivaron en el aseguramiento de armamento y vehículos presuntamente utilizados por grupos delictivos.
Con este refuerzo, las autoridades buscan restablecer el orden y evitar nuevas confrontaciones. Al llegar a Culiacán, los efectivos militares desplegaron un operativo de seguridad que incluyó patrullajes estratégicos y labores de reconocimiento en áreas identificadas como de alto riesgo.