Integrantes de la Alianza Mexicana contra el Fracking (extracción de gas y petróleo) protestaron frente a las instalaciones de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), en Avenida Patriotismo, delegación Álvaro Obregón, tras el anuncio de la apertura por parte de la de las licitaciones para la exploración y extracción de hidrocarburos.
"Esta práctica de fracking se hizo previo a la Reforma Energética, Pemex por contrato y actualmente después de la ronda cero lo sigue haciendo Pemex, pero en esta ocasión se involucra a los procesos de adjudicación a empresas nacionales y extranjeras que quieran realizar esta actividad en nuestro territorio.
"Hoy se va a hacer el anuncio de las áreas que se van a abrir y por eso nos presentamos a exigir que se detenga este proceso ya que el cambio climático es una realidad científica innegable, la aportación que la extracción por medio de fracking hace al cambio climático es muy grande por las fugas en el proceso, esta cantidad de emisiones es incluso mayor al impacto por quema de carbón", señaló Claudia Campero, miembro de la organización Food & Water Watch.
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La activista señaló que de acuerdo con lo anunciado por el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, las próximas áreas del territorio que serán entregadas para la explotación de gas y petróleo no convencional mediante fracking se encuentran en la Cuenca de Burgos, en el estado de Tamaulipas, que se sumarían a las ya afectadas por esta actividad en Coahuila, Nuevo León, Veracruz, Puebla y el mismo estado de Tamaulipas. Asimismo, los planes del gobierno incluyen extender esta actividad a San Luis Potosí, Hidalgo y Oaxaca.
La alianza destacó que este anuncio se inserta en la estrategia del gobierno que, en un contexto de final de sexenio y en palabras del Secretario de Energía, busca intensificar este año la entrega de territorios para la exploración y extracción de hidrocarburos, tanto convencionales como no convencionales en aguas del Golfo de México y en tierra.
Uno de los argumentos para ello es la supuesta necesidad de producir más gas natural para generar energía y reducir la dependencia de su importación de Estados Unidos. Sin embargo, de manera poco coherente con este argumento, el gobierno también está promoviendo la construcción de 17 gasoductos para importar más gas del país vecino.
"La Alianza Mexicana contra el Fracking llama a la ciudadanía en general a exigir el alto de la entrega de territorios para este propósito. El fracking como técnica, independientemente dónde, cuándo y cómo se haga, representa una violación grave a los derechos humanos, amenaza el agua y pone en peligro el clima del planeta", alertó.
IRH