San Juana Yazmin Domínguez Quiroz, vendedora de gorditas opina que la tradición de la cuaresma de elaborar las 7 cazuelas ha cambiando mucho, preferentemente por la situación económica y además las tradiciones están cambiando.
Por ejemplo, mencionó que la gente ya no se inmuta por consumir carne en esta temporada, en la cual años atrás era una situación que se respetaba mucho.
Dijo que ella se da cuenta porque durante estos viernes de cuaresma la gente le pedía gorditas preferentemente de guisos con carne y sus clientes le manifestaron que eso de no comer carne en días santos quedó atrás.
“Hasta hace diez años todavía recuerdo, que la gente para estas fechas sí procuraba no comer carne e incluso, había muchas cosas que recuerdo nos prohibía mis abuelos, por ejemplo, no podíamos escuchar música o ver la televisión en un Viernes Santo, por respeto, ya que es día había sido crucificado Jesuscristo”.
Un factor para ella determinante es la economía, pues elaborar las 7 cazuelas es costoso, “además con esto de la pandemia muchas personas se quedaron sin trabajo y no tienen más que para una sopita, frijolitos y párale de contar”.
En el puesto de gorditas también ha escuchado decir a muchas personas que no les gustan mucho los platillos de cuaresma, “no toda la gente come ese tipo de alimentos”.
Sin embargo, ella manifestó que en su casa a sus hijos sí les elabora platillos propios de la cuaresma, “yo sí preparé pipían con papitas, capirotada, torrejas y lentejas, cada viernes le cambiaba, pero sí vemos que vivimos tiempos diferentes”.
En Matamoros considera que al igual que en otras entidades, las costumbres en torno a la Semana Santa han cambiado y más ahora con la pandemia, "la gente se ha relajado mucho, pues hasta ya ni visitan los templos religiosos así que la costumbre de comer este tipo de alimentos propios de esta temporada, están desapareciendo y esto se ha visto agudizado por la pandemia del covid-19", opinó.
EGO
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