El ayuntamiento de Cuernavaca se mostró abierto al diálogo con los propietarios de restaurantes y bares para proponer las soluciones que permitan realizar sus actividades dentro de la ley, pero aclaró que no permitirá más actos de impunidad, corrupción, ilegalidad y abusos que autoridades pasadas permitieron.
Luego de diversos hechos registrados en la ciudad dentro y fuera de establecimientos dónde resultaron agraviados clientes, el ayuntamiento de Cuernavaca activó un programa de supervisión a restaurantes, bares y centro nocturnos, que concluyó con la reciente clausura de varios negocios por violentar los reglamentos municipales.
El presidente municipal de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, manifestó su postura de no dar paso atrás a su política de cero tolerancia para quienes violentan las leyes. Y más cuando está en peligro la integridad física y material de jóvenes y familias que buscan divertirse en establecimientos que laboren dentro de la normativa vigente municipal.
"El ayuntamiento abre espacios de comunicación y diálogo permanente con los propietarios de restaurantes y bares para que ambos asuman con responsabilidad sus obligaciones en el respeto a la ley", recalcó.
Pero advirtió que la autoridad municipal no cederá a presiones, actos de corrupción ni chantajes, a cambio de violentar las leyes en agravio de las familias de Cuernavaca, como gobiernos pasados que fueron omisos en la aplicación de los ordenamientos jurídicos municipales.