La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó una alerta epidemiológica debido al aumento de casos de gonorrea con resistencia a los antibióticos.
El pasado 2 de febrero se emitió un documento en el cual la organización sugiere a los países miembros incrementar la vigilancia y capacidad de diagnóstico para detectar la infección causada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae, y así lograr que los pacientes puedan recibir tratamiento médico.
En el continente americano, los primeros casos de este tipo datan del año 2007, pero desde entonces se han detectado aún más en países como Estados Unidos, Canadá, Argentina y Brasil.
Por ello, “la OMS recomienda a sus estados miembros implementar acciones de prevención y control para contener la propagación de cepas resistentes a cefalosporinas de espectro extendido”, cita el texto.
En ese sentido se sugiere fortalecer la vigilancia epidemiológica a través de la colaboración entre los laboratorios y los programas nacionales de combate a VIH y enfermedades de transmisión sexual; además de promover la sensibilización pública sobre el tema.
Al respecto, el activista Abel Quiroga, fundador de Acodemis y La Casita, advirtió que los esfuerzos de combate a ETS en general se han quedado cortos por parte del sector gubernamental, principalmente desde la perspectiva preventiva.
“Es una carencia de políticas públicas, de sensibilidad del gobierno.
“Y si lo vemos como un tema de salud sexual, también están los embarazos en adolescentes, por ejemplo, que no solo implican el tener el producto, sino incluso adquirir una infección”, dijo.