La alta concentración de humedad producto de las lluvias ocurridas en los últimos días en la Comarca Lagunera, afecta los pasos vehiculares con estructura rocosa.
Un ejemplo de esto en la última etapa de la ampliación del bulevar Laguna, sobre todo en el tramo que conecta la colonia Rinconada con la Francisco I. Madero, en Torreón.
La pared poniente de la construcción, hecha con piedra caliza, presentó nuevos desprendimientos a pesar de la colocación de un muro de concreto y una malla para sostener las rocas.
Diariamente, Iris y su amiga recorren a pie los 2.5 kilómetros que comprenden este peligroso tramo que parte del Cerro de las Noas para conectar el sur con el poniente de Torreón.
Ellas al igual que deportistas, regularmente transitan el lugar y su integridad corre peligro con la caída de rocas, que llegan a alcanzar un peso de hasta 100 kilos.
Esta mañana, pequeñas y grandes piedras invaden el carril que conduce hacia el sur de Torreón.
Es evidente que el paso del tiempo ha causado daños en las mallas de seguridad que el Ayuntamiento instaló, por lo que es necesaria una reparación inmediata.
dcr
