Un grupo de mujeres triquis, desplazadas de la comunidad indígena San Juan Copala, se confrontó y jaloneo con los policías estatales que resguardaban la puerta principal del Palacio de Gobierno en Oaxaca, cuando trataron de ingresar por la fuerza al inmueble.
Las inconformes, también buscaron colocar un manta en los accesos al inmueble argumentando no querer ser recibidas en audiencia por autoridades estatales para discutir su regreso a su comunidad de origen.
Durante varios minutos las mujeres se jaloneros con los elementos de seguridad hasta que una misión de funcionarios entabló diálogo con las manifestantes para encauzar sus demandas.
Las mujeres indígenas son lideradas por Lorena Merino que representa a uno de los cuatro grupos de desplazados que gozan de medidas cautelares dictadas por organismos de derechos humanos y que buscan el regreso seguro a sus comunidades de origen, luego de que hace 6 años fueron desplazadas por grupos hostiles ligados con organizaciones rivales con quienes disputan el territorio.
Según Merino hay incumplimiento con lo acordado el pasado 13 de septiembre cuando se firmo una minuta de compromisos para adquirir un predio Santiago Juxtlahuaca, para reubicar a los desplazados.
En tanto, el gobierno de Oaxaca reconoció que cuenta con un plan para reubicar a los indígenas triquis que fueron desplazados del poblado de San Juan Copala, por condiciones de violencia, de los cuales unos 135 cuentan con medidas cautelares dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Lo único que hace falta es que haya un acuerdo y un entendimiento entre los grupos afirmó el secretario general de Gobierno Alfonso Gómez.
Dijo que hace poco tuvo una reunión con el subsecretario de Gobernación, Roberto Campa Ciprian, para afinar los detalles de la reubicación y adelantó que se tienen dos poblaciones ubicadas una en la zona de la mixteca, una cerca del municipio de Huajuapan de León y otra en zona conurbada de la ciudad de Oaxaca, donde ya se cuenta con los terrenos que servirán de asentamiento a las familias desplazadas.
Precisó que solo se revisa que los polígonos llenen los requisitos legales y urbanísticos, pues se trata de ofrecer las condiciones dignas a las familias para vivir.
Gómez Sandoval afirmó que aún se dialoga con todos los grupos de desplazados, porque persiste el interés de un sector por regresar a su comunidad natal e insisten en manifestarse frente a la sede del palacio de gobierno.
"La gente tiene derecho a manifestarse, pero la atención es muy puntual y por eso la se ha dialogado con ellos y se está en la conformidad, en saber que muy pronto tendrá una solución definitiva ante la imposibilidad que tienen muchos de ellos en regresar seguramente a San Juan Copala", explicó.
El funcionario dijo que en lo que se logra la reubicación de los desplazados, el gobierno de Oaxaca apoya a las familias triquis con la renta de sus viviendas, atención médica y útiles escolares a los niños, además de que se les suministra insumos semanales y mensuales para su bienestar.
Agregó que también se les apoya con la celebración de ferias artesanales para que promuevan sus productos y que de dichas ventas obtengan ingresos propios.
Gómez Sandoval reiteró que en ningún momento el Estado se ha apartado de su compromiso con las victimas de desplazamiento.
"En los últimos años, el gobierno de la República y el gobierno de Oaxaca hemos avanzado de manera importante para hacer efectivo el respeto y la defensa de los derechos humanos de las personas y grupos cautelados, toda vez que es el compromiso del Estado mexicano el cabal cumplimiento a estas recomendaciones", afirmó.
Dijo que de parte de las autoridades locales existe toda la voluntad para continuar haciendo efectivo el derecho de aquellas personas que cuentan con la protección de la CIDH, "a fin de brindarles las garantías de seguridad, atención médica, educación y alimentación, y con ello gozar de una vida saludable".
 
	