Madres de familia denunciaron que el Hospital Materno Infantil de Tijuana, en Baja California, les realizó exámenes toxicológicos sin su consentimiento y, con base en esos resultados, les retiraron a sus bebés recién nacidos.
Una de las afectadas es Blanca López, quien lleva ocho días sin ver a su hijo, luego de que el 7 de febrero personal médico del nosocomio le informara que ella y su bebé dieron positivo a metanfetamina en la prueba.
“Estoy mal, necesito saber de mi bebé, necesito tenerlo de vuelta, es mío”, expresó.
Ella se realizó una segunda prueba en un laboratorio particular y resultó negativa; a pesar de ello, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) no le ha devuelto a su hijo.
Pudo tomarle una fotografía el 6 de febrero, cuando dio a luz; de esa forma podrá asegurarse de que le entreguen a su hijo y no a otro, explicó.
Ericka Medina vivió una situación similar. Le quitaron a su bebé por tres días, hasta que una nueva prueba descartó el supuesto consumo de drogas.
“No tenían pruebas ni el examen toxicológico, solo llamaron al 911, y en el expediente decía que el bebé salió positivo a metanfetamina y yo a marihuana, además de una anotación de que se realizaría un segundo examen”, declaró.
La abogada María Elena Chan lleva ambos casos y explicó que solo la Fiscalía General del Estado (FGE) puede ordenar un examen antidoping.
“El hospital está cometiendo los delitos de declaración falsa y sustracción de menores”, advirtió.
También denunció que, desde 2019 a la fecha, representó a 25 mujeres por casos similares. Por ello, exigió a las autoridades de la Secretaría de Salud y de la Fiscalía de Baja California una auditoría e inspección al hospital.
AV
