La falta de dragado por más de diez años, aunada a las 18 descargas pluviales de las colonias aledañas, amenazan la laguna del Carpintero como atractivo turístico y ecosistema natural, pues enfrenta el riesgo de presentar un grave problema de contaminación similar al que se tuvo en los años 80, que el volumen de agua se reduzca por el azolve, y que la materia orgánica y desechos residuales desarrollen un ambiente de alta eutrofización, es decir de proliferación de algas.
Advirtieron lo anterior especialistas en materia ambiental, en tanto que el director de Ecología, Carlos Paniagua Arias, reconoció que la última vez que el vaso lacustre recibió mantenimiento fue en el trienio del ex alcalde Álvaro Garza Cantú (1990-1992), tiempo en el que fue rescatado y posteriormente sólo recibe la descarga de aguas pluviales de los sectores adyacentes, acumulación que al paso del tiempo emana malos olores.
El funcionario señaló que para llevar a cabo los trabajos de dragado se necesitan por lo menos recursos por cien millones de pesos, monto del que las administraciones municipales no han podido disponer, pues no les ha sido asignado en sus presupuestos de egresos.
"Actualmente no se tiene contemplado dragar la laguna del Carpintero porque se requiere de esa inversión costosa y del apoyo de los diputados locales, para que el gobierno de Tampico pueda contar con esta cantidad de dinero".
Por su lado, el oceanólogo Marcelo René García señala que el primer paso para salvar la laguna es la aireación, un mecanismo con el que se evitaría que haya exceso de materia orgánica. El procedimiento es necesario para proporcionar oxígeno al efluente, reiteró.
Insistió en que de no aplicarse este método en la laguna, por el tiempo transcurrido la ciudad está cerca de volver a padecer los olores pestilentes de los años ochenta.
"Estamos muy cercanos de este problema, es muy posible que a corto plazo la laguna del Carpintero, vuelva a tener los malos olores que se percibían en los ochenta tomando en cuenta la evaporación que está tan intensa por la temperatura que tenemos, eso hace que los microorganismos reproduzcan más bacterias y el problema se agudiza, porque entre más materia orgánica entre, será mucho mayor la descomposición", explicó.
El titular de Ecología, reconoció que el cuerpo de agua no se draga desde el trienio de Álvaro Garza, por lo que ya han transcurrido más de veinte años de estar recibiendo descargas de 18 canales pluviales provenientes de las colonias Santo Niño, Fraccionamiento Laguna del Carpintero, Barandillas, Obrera y Tolteca, entre otras, situación que se agrava cuando llueve ya que trae consigo basura de todo tipo.
Añadió que el desazolve es urgente para mejorar las condiciones del vaso lacustre; se tienen que sacar todos los lodos, meter tuberías e ingresar las dragas grandes.
"Es necesario que se proceda con esta acción, se trata de una inversión costosa, (por lo que) se habrá de requerir de la colaboración de los tres niveles de gobierno y que los diputados ayuden en las gestión de los recursos, porque se trata de un punto turístico".
De acuerdo con la investigación realizada por el oceanólogo, Marcelo René García, la aireación es un procedimiento que no resulta oneroso, por lo menos representaría el 10 por ciento de lo que cuesta un dragado (cien millones), además, el problema del dragado es que se debe contar con un chalán y encontrar los lodos que están en el lugar desde hace mucho tiempo y que tienen ciertas características contaminantes.
Indicó que ahí se tienen que sujetar a ciertas disposiciones que "por ley" se tienen que seguir en torno al manejo de los lodos, lo que complicaría aún más el llevar a cabo dicho procedimiento.
Mencionó que anteriormente, la Secretaría de Marina a través de la Estación Oceanográfi ca realizaba los estudios correspondientes y llevaba un control de la calidad del agua y actualmente ya no se lleva ningún control a este respecto.
"Cuando estuvo Álvaro Garza, se realizó una aireación, el dragado sí sirve, porque se azolvaría un área de aproximadamente 8 kilómetros de ancho y alrededor de 12 kilómetros de largo, la Laguna del Carpintero tiene comunicación permanente con el río Pánuco y entra agua salada, pero se debe considerar que el rescate fue para convertirlo en un sitio turístico y de recreación", enfatizó.
De acuerdo con el biólogo Héctor Gojón Baez, para rescatar la laguna del Carpintero es necesario identificar los puntos de contaminación mediante muestreos del agua, de fondos y lodos, de esta forma se podrá detener el problema y aunque se escuche descabellado se podría hacer uso del pez diablo como guía indicador de contaminación.
Al determinarse el tipo de contaminantes, se debe proceder con la remediación del vaso lacustre ya sea con organismos o algún tipo químico descontaminante, precisó.
Consideró que las descargas de aguas pluviales provocan mayor afectación, por tanto recomendó que se deba remediar de manera constante los ductos de descarga de manera específica.
"La laguna del Carpintero se puede salvar y se puede evitar mayor contaminación, sobre todo si se quiere y se cuenta con el capital político y económico para buscar la remediación claro que se puede... el trabajo de investigación que se ha estado haciendo con el pez diablo se puede utilizar, no está descabellado se puede aprovechar para un beneficio ecológico y puede servir como un guía indicador de contaminación ", aseveró.
Gojón Baez, destacó que existe en la entidad tecnología importante para descontaminar cuerpos de agua grandes como la Laguna del Carpintero y salvarla desde el punto de vista ecológico y económico, ya que se gasta menos dinero en prevenir que en remediar.
"Tenemos gente entrenada en Tamaulipas que podría participa en la investigación y propuestas de remediación, que tienen ideas muy innovadoras, pero primero se debe atacar el problema de origen porque de nada servirá si seguirá ingresando el contaminante", sostuvo el biólogo, quien también es director de Vinculación de la Universidad Tecnológica del Mar.