Dos incendios forestales ocurridos la tarde y noche del jueves dejaron como saldo decenas de hectáreas de pastizales y algunos cultivos devastados por el fuego que después de arduas labores de brigadas de la Comisión Nacional Forestal, Protección Civil municipal y pobladores lograron sofocarlos.
Uno ocurrió en el ejido Estación Micos que llegó también a Estación Quinientos desde antes del anochecer y que se prolongó durante parte de la noche, avivándose por los vientos que se registraron desde temprano.
La Conafor aún no cuantificaba las hectáreas siniestradas pero rebasaba las 20, consumiéndose vegetación seca, arbustos y árboles principalmente en la sierra.
En el ejido Cerro Alto se presentó otro también al parecer por una quema controlada que se salió de control, y en este caso afectó a algunos pobladores a los que se les quemó parte de sus viviendas y herramientas de trabajo.
Los brigadistas y ejidatarios trabajaron durante varias horas para calmar el fuego.
En la zona urbana los Bomberos también tuvieron tareas con incendios de monte y este viernes uno en una vivienda que quemó una parte de la casa construida de raja de palma y adobe y que se originó aparentemente por una veladora que los moradores tenían encendida, esto poco antes del mediodía. Después atendieron uno en un basurero clandestino en la colonia Las Águilas.