Guadalupe Rodríguez Narciso, vocera del colectivo de familiares de desaparecidos de Guerrero y el país, murió por covid-19. Sus familiares indicaron que no logró encontrar a su hijo Josué Molina Rodríguez, de quien no tuvo información desde el 4 de junio de 2014.
Rodríguez Narciso encabezó al colectivo desde su conformación en la capital de Guerrero, luego de que el movimiento impulsado por los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa motivara la creación de organizaciones similares en Iguala y Acapulco.
Sus compañeras de organización reportaron, a principios de agosto, que la vocera se había contagiado de covid-19, tras acudir a realizar varias diligencias en oficinas de la Fiscalía General de la República (FGR).
En julio, acudió a diferentes medios de comunicación para hacer un llamado a familias de personas desaparecidas para realizarse estudios de ADN y permitir con ello la identificación de restos humanos que aún se encuentran sin identificar.
En las últimas dos semanas su estado de salud se complicó y fue trasladada hacia el hospital general de la ciudad de Iguala, donde se tiene habilitada una unidad especial para atender casos de coronavirus.
La noche del 27 de agosto, después de varios días en condiciones críticas, la familia de la Rodríguez Narciso confirmó su deceso.
ROA
