Desde hace cinco años que los integrantes de Grupo Vida junto a las autoridades estatales trabajan en el cementerio clandestino en San Antonio del Alto municipio de Matamoros, Coahuila. Desde entonces, se han extraído restos que probablemente corresponde a 160 probables identidades de quienes fueron enterradas previo proceso de calcinación.
Silvia Ortiz, vocera del colectivo, señala que siguen apareciendo restos por lo que continuarán en este punto los trabajos en donde en esta última semana se logró detectar a por lo menos 3 posibles identidades.
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Como lo había dado a conocer Silvia, en la región lagunera se han detectado hasta el momento un total de 27 cementerios clandestinos en los municipios de San Pedro, Francisco I. Madero, Viesca, Matamoros y Torreón, mismos que han sido ubicados gracias a los reportes anónimos ciudadanos.
En la localidad de San Antonio del Alto, fueron localizadas tres fosas. Incluso, en la tercera se encontraron cinco vértebras pegadas, un fémur en el que se ve un corte destazado por parte de los delincuentes, ya que estos los depositaban en un tambo para calcinarlos y dejar la menor huella posible, hueso conocido como sacro a la altura de la cadera.
Dijo que se estima que en este sector que fue utilizado como un cementerio clandestino es posible que haya restos de hasta 160 personas en los últimos cinco años.
Explicó que los restos óseos que se han detectado se encuentran calcinados pero sí hay posibilidades de que la autoridad pueda extraerles el ADN para que puedan ser regresados a sus casas y con sus familiares.
Las autoridades que realizan las acciones de búsqueda son la Fiscalía General de Justicia de Coahuila a través de la Comisión Estatal de Búsqueda y los integrantes de Grupo Vida.
aarp
