En el mundo del cine, algunos directores son tan introspectivos como sus obras. Guillermo del Toro pertenece a ese grupo de creadores que no solo conciben universos fantásticos, sino que también enfrentan transformaciones muy humanas.
A lo largo de su carrera, este cineasta ha compartido fragmentos de su vida personal con la misma pasión que imprime en sus cintas cinematográficas.
Una nueva reflexión ha captado la atención, pues no se trata de cámaras o criaturas clásicas como nos tiene acostumbrados, sino de salud decisiones cotidianas y un toque de humor.
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¿Porque tomo la decisión de modificar sus hábitos?
En una entrevista para Despierta América de Univisión, Guillermo del Toro explico que el cambio surgió tras una complicación. Con su característico humor comentó:
"Conforme te vas haciendo más viejo, te pones más asustado de que hay que bajarle a los tacos".
Este cambio no fue impulsado por vanidad, sino por la urgencia de cuidar su bienestar físico.
¿Como ha impactado este cambio en su apariencia?
Varias fuentes creen que el cineasta logro una transformación notable, perdiendo más de 100 libras, lo que lo hace casi irreconocible en eventos recientes.
Este efecto visual refuerza la magnitud del cambio que ha experimentado.
¿Qué significa este cambio para su vida y su legado?
Este ajuste en el estilo de vida no solo revela una prioridad renovada hacia su salud, sino también una capacidad de reconfigurarse más allá del arte.
Guillermo del Toro demuestra que, incluso con su papel como figura pública, no está exento de enfrentar decisiones reales y significativas.
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