La televisión y el mundo del espectáculo ha visto 'caer' a diversos personajes de la farándula, como el lamentable caso de Giorgio Palacios, un reconocido actor.
Éste hombre fue una estrella en México durante la emisión del programa 'Cachún Cachún ra ra', en donde interpretó el personaje de 'Giorgio'. Fue gracias a su talento y carisma que la audiencia lo aceptó rápidamente.
Giorgio Palacios, de la fama nacional a la incertidumbre
Sin embargo, los años pasaron y aunque sí tuvo cuidado con hacer de sus ganancias algo provechoso, lo cierto es que nunca esperó perder todo; especialmente de la manera más inesperada, así como sorpresivamente.
De acuerdo con una charla que tuvo para una revista de espectáculos, el actor vivía en Acapulco, tranquilamente, pero fue con la pandemia que todo comenzó a ser cada vez más difícil, lo cierto es que Palacios estaba preparado para emergencias.
"Estoy en momentos difíciles. Mi carrera siempre fue muy bendecida, pero después de la pandemia por covid a todos nos fue mal. Desde ahí empezó mi problema económico y vinieron las operaciones de mi hermano. Tenía mi colchoncito, pero estuve a cargo de mi familia. Mi papá estuvo 20 años con cáncer y mi madre murió de esa misma enfermedad".
El famoso no solamente tuvo que enfrentar la enfermedad de sus padres y su hermano, pues también a él lo sometieron a cirugías para retirarle estragos del cáncer de piel que desarrolló en la nariz e incluso agradeció el apoyo recibido de la primera actriz Leticia Perdigón.
Palacios indicó que todo se vino abajo luego de que Otis arrasara con todo Acapulco, pues en su furiosa visita se llevó todo lo que conservaba para salir adelante, así como objetos de uso diario y personal.
"Vivía en Acapulco. Me quitaron dos carcinomas de la nariz. Me operaron en un hospital privado. Leticia Perdigón me ayudó mucho. En esa época vino el huracán ‘Otis’ y perdí todo: Mi carro, ropa, computadora, dinero, cadenas, celular y colección de lentes de marca".
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Palacios pide ayuda para salir adelante
Lo único que le quedó a Giorgio fue su noble y fiel amigo: su perrito. Acotó que cuando fue el momento de resguardarse por la llegada de Otis, solamente tomó a su 'lomito' y se encerraron en el baño a esperar que todo pasara.
"Todo, menos mi perro Dogar. Lo agarré y nos metimos al baño. Estaba a 1 kilómetro de la playa, en media montañita. Ahí se acabó la felicidad. Solo me quedé con las llaves de mi carro. Lo perdí todo, menos la vida, bendito Dios".
Con preocupación mencionó que le acaban de descubrir una hernia, la cual requiere intervención médica inmediata, solamente que en estos momentos no tiene manera de atenderse e incluso existe la posibilidad de reincidir en el cáncer.
"Tengo una hernia inguinal desde hace año y medio. Se me está reventado. Hay sospecha de una hiperplasia, que puede volverse cáncer. Me harán análisis y todo. No me he podido operar, porque ha sido una tras otra".
El actor dijo con humildad y honestidad que sabe las vueltas que puede dar la vida, sin embargo, aceptó las peripecias que pueden llegar a ocurrir y solamente clamó para que le brinden apoyo con trabajo y reponerse económicamente poco a poco.
"Así es la vida. Da vueltas. Estás arriba y de pronto abajo, pero nunca me había tocado estar en el sótano. Por eso decidí hacerlo público, con honestidad y humildad. Dios me habló al corazón y me dijo: 'Quítate el orgullo y pide ayuda’".
Ahora clama por trabajo para salir adelante y ayudarse a mejorar la situación que vive en estos momentos, especialmente porque vive en la sala de una amiga, junto con su hermano y su mejor amigo Dogar, que fue lo único que le quedó tras Otis.
KVS
