Federica Quijano, integrante del grupo Kabah y hermana del Apio Quijano, abrió su corazón en un reciente capítulo del podcast Pipiris Nights, que encabeza el cantante, compartiendo detalles sobre su vida personal que pocas veces había hecho públicos.
La cantante habló sobre los desafíos que enfrentó como madre adoptiva y cómo su orientación sexual influyó en su experiencia familiar y social pues llegó a confesar que ha tenido miedo de que le pudieran quitar a sus hijos por ese motivo.
En la conversación con su hermano, Federica detalló las dificultades que enfrentó para ser reconocida como madre y los prejuicios que la rodearon, tanto en la sociedad como en instituciones educativas.
Señaló que el temor a ser juzgada o incluso a perder a sus hijos fue una preocupación constante durante muchos años. Sobre la expectativa de ser una madre perfecta y las barreras que enfrentó pues la cantante reveló que es bisexual, Federica comentó:
“Soy bisexual y sí ha sido difícil porque, como mujer, y más como adopté a mis hijos, esperan que seas la mamá perfecta para el niño perfecto, para hacer la familia”.
También recordó episodios en los que su orientación sexual fue motivo de discriminación:
“Había escuelas donde iba y (me decían) ‘no, pues tiene que tener a fuerza un papá para entrar’. Llegan tantas cosas y a mí me daban miedo tantas cosas, de ser atacada, juzgada, de que me quiten a mis hijos”.
Afortunadamente, sus hijos ahora son mayores, pero las preocupaciones del pasado aún la marcaron:
“Ahorita, gracias a Dios, mis hijos son mayores de edad, pero sí viví con ese miedo de ‘me van a quitar a mis hijos, me puede quitar a mis hijos’ o qué van a decir en la escuela”, compartió.
Sobre su vida amorosa, Federica subrayó que ha amado más allá del género de sus parejas:
“Me he enamorado del ser humano, la persona, el corazón de la persona. He tenido hombres maravillosos y he tenido mujeres maravillosas”.
Con estas declaraciones, Federica Quijano demuestra que la maternidad y el amor no tienen etiquetas, y que aún existen desafíos y prejuicios para quienes forman familias de manera no convencional.
¿Quiénes son los hijos de Federica Quijano?
La artista adoptó a sus dos hijos,
Sebastián, de 18 años, y María,quienes se han convertido en una parte fundamental de su vida. Federica ha equilibrado su carrera musical con la crianza de sus hijos y su participación en causas sociales relacionadas con la adopción y la familia.
La cantante ha destacado que su compromiso con sus hijos va más allá del cuidado cotidiano. A través de sus redes, comparte momentos especiales con ellos y promueve la concientización sobre la inclusión y el respeto hacia todas las familias.
En el programa De Primera Mano con Gustavo Adolfo Infante, Federica relató cómo conoció a su hijo Sebastián:
“A diferencia de mi hija, lo abandonaron en un basurero en la Ciudad de México, lo dejaron con el cordón umbilical tirado en el basurero, con neumonía, rinitis, descalcificado y mordido por ratas y demás, peleó por su vida”.
Según explicó, de bebé estuvo hospitalizado más de dos semanas, un período que para ella demostró la fuerza y las ganas de vivir de su hijo:
“Estuvo 20 días en el hospital tratando de salvarse, para mí todo el esfuerzo que hizo para vivir esta vida y sobrevivir, para mí se merece que es un guerrero y que me haya escogido a mí para acompañarlo en este camino tan difícil…”.
Sebastián, hijo de Federica, vive con autismo, una condición del neurodesarrollo que afecta la comunicación, la interacción social y puede involucrar patrones de comportamiento repetitivos o intereses restringidos. La cantante ha compartido los retos y aprendizajes de ser madre de un niño con esta condición, buscando generar conciencia y comprensión sobre el Trastorno del Espectro Autista (TEA).
En enero de 2024, Federica compartió en sus historias de Instagram cómo vive los momentos difíciles con Sebastián:
“A veces, como mamá azul (color alusivo al espectro autista), es como una montaña rusa… hay días que Sebastián está increíble y que ves a tu hijo a los ojos, y te corresponde, y te ve y te abraza, y te ama… y tienes estos momentos que valoras muchísimísimo como mamá”.
No obstante, también hay días complicados:
“Crees que no has avanzado nada y que todos los logros que creíste que habías conseguido, van para atrás”.
Federica confesó el impacto emocional de estos momentos:
“Me duele el brazo pero me duele más el alma, me duele más el corazón; me duele más, de pronto, ver tan lejos a mi hijo”, reveló. “Sentirme tan ajena a lo que estás siguiendo, y eso duele más, por eso hoy quiero darles gracias por sus mensajes, llenos de amor, de buena vibra”.
La cantante enfatizó que cada persona con autismo enfrenta desafíos únicos, y su experiencia es una batalla personal:
“Estoy muy molesto con él, y se vale, y aunque sé que tiene esa discapacidad, no deja de dolerme o no dejo de responder de una manera humana, con coraje, como, ¿por qué? Cuando él ni siquiera se está dando cuenta que me está lastimando así, y al rato se da cuenta y se siente mal”.
Con estas declaraciones, Federica Quijano no solo muestra su dedicación como madre adoptiva, sino que también se posiciona como defensora de la inclusión y la sensibilización hacia las familias y personas con autismo.
JCM
