Espectáculos

Un viaje onírico que explora la fe: la mexicana Karla Badillo estrena su ópera prima en el TIFF

Karla Badillo estrenó ‘Oca’ en el TIFF, acompañada de Natalia Solián y Cecilia Suárez, en la misma edición en la que Guillermo del Toro presentó Frankenstein

Karla Badillo llevaba más de una década forjando su camino en la industria cinematográfica desde la producción, y al fin consiguió que su ópera prima ‘Oca’, fuera seleccionada entre más de seis mil trabajos para presentarse en el Toronto International Film Festival (TIFF), a donde viajó acompañada por parte de su elenco, incluida la protagonista Natalia Solián y Cecilia Suárez, quien interpreta a otro de los personajes centrales.

“Diría que Oca nació de un sueño. Yo sueño mucho mientras duermo. Por un lado me siento muy atraída por el mundo de los sueños y, por otro, tengo una relación de fascinación y desilusión por la religión católica. En algún momento leí sobre el significado del juego de la oca y descubrí que el tablero representa una guía cifrada del camino de Santiago de Compostela, eso me resonaba con mi educación profundamente religiosa y se hacía espejo con las múltiples peregrinaciones que suceden en México. Cuento esto porque usé el tablero como la estructura”, explicó Badillo en entrevista con MILENIO.


Para Cecilia Suárez, esta es una película relevante por lo que significa en la trayectoria de la directora.

“Creo que Toronto es una plataforma muy importante para una ópera prima y para una directora con la voz de Karla. Es una directora bien interesante, desde sus cortometrajes, que yo había visto —de hecho, la primera vez que descubrí que Karla era una creadora, una directora y una autora, fue mientras filmábamos Perfectos desconocidos—. Cuando vi ese cortometraje dije: ‘aquí hay una voz, claramente, aquí hay una propuesta y esta mujer tiene mucho que contar, mucho que decir’”, compartió la actriz en la alfombra roja, previo a la premier.

Solián, quien reconoció que se esforzó intensamente en dar vida a su personaje, coincidió en la visión de Badillo, complementada con la de la fotógrafa Diana Garay, la diseñadora de producción Ana J. Bellido y la supervisora musical Paulina Márquez.

“Ellas tenían muy claro cómo se había planteado metafóricamente el shooting de la película y para mí era muy interesante el reto de completar esa ilusión. Con Karla trabajamos mucho acerca del tono porque, si bien el personaje es muy expresivo, yo quería disminuir mi tendencia al máximo de contar con mi cara lo que estaba pasando, porque ciertamente las personas que viven en el universo de la religión son muy contenidas. Pero sin duda la situación es tan extrema que había que traducir lo que estaba pasando con el cuerpo. Fue un equilibrio interesante el poner los acentos donde tenían que ser para que la música de la película sonara como Karla lo estaba intentando calibrar”, nos dijo Solián en la alfombra.

De la producción a la dirección

Badillo había colaborado en proyectos importantes como La delgada línea amarilla, La casa de las flores, Cómprame un revólver y Ruido.

“Mi forma de acercarme al cine ha sido la producción; a lo largo de los años me he formado como productora, estudiando y colaborando en distintas áreas. Hace un par de años produje un par de películas en las que pude vivir el cine como expresión y no como entretenimiento. Una de ellas fue Eureka de Lisandro Alonso en la que participé como coproductora y en la que encontré el acto de fe que implica hacer cine”, recordó Badillo.
Karla Badillo en el TIFF
Karla Badillo en el TIFF | Mariana Mijares


Pero si bien durante varios años trabajó en la industria, la inquietud por dirigir siempre estuvo presente.

“Siempre me interesó dirigir y me parecía que la forma en que ocurriría más rápido era produciendo, porque no tenía ningún contacto en la industria y producir significaba entender el imaginario del cine y saber cómo se hace posible. Hasta ahora ha resultado”, consideró la directora.

El peregrinaje como despojo

La película sigue a Rafaela (Natalia Solián), una joven monja que, entre visiones y dudas, emprende una peregrinación para encontrar a un arzobispo y asegurar la supervivencia de su congregación: Las Marianas, de la que apenas quedan tres hermanas. En el camino enfrenta pruebas que exponen la fragilidad de la fe en un mundo materialista y contradictorio, como su encuentro con Palmira (Suárez), una mujer que simboliza el privilegio.

Desde la mirada de Suárez, Oca también adquiere un sentido colectivo y profundamente mexicano, y encontró en el guión preguntas inquietantes y actuales.

“Me parece que el mosaico que Karla arma dentro de las historias múltiples, es un poco el reflejo de nuestro país, de las multiplicidades que hay y de cómo convivimos todos de alguna manera yendo hacia un mismo punto. Y me parecía que la historia, más que yo decir: ‘trata de esto’, lo que me atrapaba del guión, desde el principio, eran las preguntas que hacía, que me resultaban muy inquietantes y muy pertinentes”, enfatizó.

Solián vivió la travesía de su personaje casi como una penitencia física.

“Siempre hay algo de la mente del actor que se concentra mucho más en el porvenir de la ficción y emocional que consigue el personaje. Pero claro, yo nunca me vi en el desierto empujando la moto, ni cargando el santo, ni haciendo las actividades que el personaje llevaba, ni acostada en el piso a la temperatura a la que estábamos. Creo que en este proyecto específicamente aprendí a concatenar esos dos universos: el mundo ideal que nos hacemos del personaje y la experiencia física. Así es que lo viví como realmente una penitencia. Para mí fue un camino muy largo y muy entrañable en el sentido de las cosas que fui descubriendo en el trayecto. No nada más actoralmente, sino también existencialmente”, compartió la también actriz de Huesera, No voy a pedirle a nadie que me crea y Familia.

La directora remarcó que el peregrinaje no solo atraviesa a Rafaela, sino también al propio proceso creativo y a la experiencia de levantar una película desde la independencia.

“Seguro que hacer cine puede ser uno de los peregrinajes más duros y extraordinarios. Oca empieza y termina su peregrinación en el festival de Toronto. Lo demás, vamos viendo”, concluyó la realizadora.

Foto de Oca de Karla Badillo
Oca de Karla Badillo | cortecia de TIFF


Un elenco que resultó escuela

Para Solián, uno de los grandes regalos de este proyecto fue compartir cuadro con Suárez, además de actores como Leonardo Ortizgris, Gerardo Trejo-Luna, Raúl Briones y Enrique Arreola.

“Es gente a la que admiro mucho. Cecilia, particularmente, ha sido para mí un ícono como actriz mexicana; creo que ha conquistado un rango expresivo muy particular, una estética propia. Ella es una persona muy profunda y era un sueño para mí poder mirarme en ese espejo y pelotear con ella la ficción. En ese sentido creo que me llevo mucho aprendizaje”, señaló la actriz.

Solián también destacó la fuerza del elenco en su conjunto.

“Raúl Briones, Gerardo, y también todo el mundo de los no actores… creo que fue una aportación muy importante para la energía con la que se contó la historia”, agregó.

También rememoró un momento con Briones le ayudó a comprender otra capa de profundidad en su personaje.

“Hay una anécdota que me gusta mucho porque en algún momento del rodaje yo estaba muy cansada y me encontré con Raúl Briones, que interpreta al arzobispo y que es un fantástico actor. Hablábamos de este cansancio y de este desgaste, y él me decía: ‘Es curioso porque cuando nos plantean un guión así, nunca pensamos en la trayectoria física del personaje, y tenía razón’”, recordó.

De Toronto a Madrid

Durante los próximos meses, Cecilia Suárez se dedicará a ensayar su primer monólogo teatral: El invencible verano de Liliana, que presentará en noviembre en el Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque de Madrid.

“Estoy ensayando un monólogo adaptado de la novela fantástica y ganadora del Pulitzer de la gran Cristina Rivera Garza, que presentaremos en el Festival de Otoño; estamos nerviosos y contentos”, adelantó Suárez.

Aunque todavía no hay fecha, a la actriz le gustaría poder presentar este trabajo en México.


Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.