Que disfrutes o no la película Dog Man depende en cierta medida de cuánto seas fanático de las novelas gráficas. Su estreno en Estados Unidos demostró que hay mucha gente interesada: recaudó 36 millones de dólares en su primer fin de semana.
El peculiar y cinético mundo del creador Dav Pilkey ha dado muy bien el salto visual a la pantalla grande, pero falta algo. La hollywoodización, como un rayo lanzado por un típico robot pesado de Pilkey, ha nivelado la idiosincrasia y sobrecargado la narrativa.
La versión cinematográfica tiene celebridades (Pete Davidson, Lil Rel Howery, Isla Fisher y Ricky Gervais), menos humor higiénico, menos juegos de palabras y realmente nada de bromas para los padres, a pesar de algunas referencias a Die Hard y Apocalypse Now.
El sentimiento de guerrilla de los libros ha dado paso a una película taquillera, llena de explosiones y con mensajes profundos sobre la paternidad, el optimismo y el amor. Lo que alguna vez se creó en el pasillo de una escuela porque su creador perturbaba las clases ahora disfruta de una campaña de marketing que incluye vallas publicitarias digitales, recorridos de personajes disfrazados y cambios en el color de las luces del Empire State Building. Flowers de Miley Cyrus está en la banda sonora. Ya no es subversivo.
Peter Hastings, director, guionista y voz animal de Dog Man, participó en la mucho mejor adaptación de Pilkey de Captain Underpants, pero esta vez reúne personajes y tramas de varios de los libros de una manera que es difícil de seguir incluso para los fanáticos.
¿De qué trata Dog Man?
Comienza con la historia del origen: el cuerpo de un policía es cosido a la cabeza de su fiel perro después de la explosión de una bomba, y luego tenemos al supervillano Petey the Cat, su adorable clon Li'l Petey, el jefe de policía y el alcalde, el pez Flippy, el robot Droid-Formigon de 80 hexotrones, un reportero de televisión agresivo y edificios que cobran vida. Se apoya mucho en A Tale of Two Kittens de 2017, el tercer libro de la serie Dog Man.
La sobriedad de las novelas gráficas desapareció y obtenemos una vida interior para Dog Man, incluida una especie de tangente extraña sobre su depresión por perder su vida pasada.
En el centro de la película hay una historia tan antigua como el tiempo, el bien contra el mal, y que Li'l Petey elegirá. Su padre, Petey, es un supervillano que necesita Prozac: “El mundo es un lugar horrible. Esa es la realidad”, le dice a su hijo, pero Dog Man ofrece una dulce alternativa. ¿Li'l Petey elegirá la sangre antes que la estabilidad? ¿El amor convertirá a Petey en el lado bueno?
hc
