La elegancia también puede ser letal. La italiana Martina Colmegna lo demostró este viernes en el Querétaro Open presentado por Mexcovery, donde selló su pase a semifinales con una actuación sobria, precisa y emocionalmente madura, al vencer a su compatriota Jessica Pieri por 6-1 y 6-3.
En la cancha central del Club Campestre, la tarde se tiñó del rojo de la arcilla y de la serenidad con la que Colmegna desactivó cada intento de rebelión de Pieri. Fue un duelo entre viejas conocidas, con historia y respeto de por medio, pero donde Martina impuso una claridad mental que marcó la diferencia. Desde el inicio quebró dos veces el servicio de su rival, tomó ventaja de 4-0 y, aunque cedió brevemente su saque, recuperó el control sin titubear. En apenas 32 minutos, el primer set era suyo.
El segundo parcial tuvo algo de drama, el que siempre deja un enfrentamiento entre compatriotas. Pieri logró igualar 2-2, pero Colmegna no perdió el pulso. Jugó con inteligencia, sin precipitarse, midiendo cada tiro como quien calibra una brújula en medio del viento. Ganó cuatro de los últimos cinco games y vio el partido caer de su lado tras una doble falta de Pieri, una escena tan simbólica como cruel: la derrota llegó no por potencia, sino por presión.
Al final, la italiana habló con la voz quebrada, pero con la frente alta:
“Estoy muy feliz y orgullosa de mí misma por este partido. Es mucha emoción estar aquí. Ella es una muy buena tenista y jugamos un partido muy bueno. Es muy difícil enfrentar a una compatriota, hay mucha tensión, nos conocemos muy bien y ambas queremos ganar. A mí me gusta jugar aquí, me gusta la altitud y las condiciones.”
Colmegna, de 28 años, confirma su madurez competitiva. Viene de cuartos en el WTA 125 de Río de Janeiro y alcanza en Querétaro su tercera semifinal del año, tras hacerlo en dos torneos ITF en Turquía. En su palmarés figuran cuatro títulos individuales y 21 de dobles, pero su mayor victoria parece ser esta nueva versión de sí misma: sólida, paciente, con la calma de quien ha aprendido a no forzar el destino.
Las semifinales ya tienen rostro y carácter:
• Sara Bejlek vs Martina Colmegna
• Hanne Vandewinkel vs Katrina Scott
En Querétaro, la arcilla es espejo de quien sabe resistir. Y Martina Colmegna —con esa mezcla de dulzura y acero tan italiana— parece hecha justo para eso: para ganar sin ruido, pero con clase.
FCM
