Abril ha sido un mes significativo para el fútbol profesional en la zona sur de Tamaulipas a lo largo de la historia. Se inauguró el Estadio Tamaulipas, se logró un ascenso a la Primera División y en el 2022 la plaza se quedó sin Liga de Expansión Mx. Ahora, un año después, la Jaiba Brava del Tampico-Madero busca recuperar en la cancha ese lugar perdido.
Fue un 20 de abril cuando Grupo Orlegi oficializó la venta del equipo adquirido en el 2016 a Grupo Tecamachalco, hoy convertido en el Atlético La Paz. La noticia cayó con serio pesar en la afición y en jugadores como Marco Millán, portero que ahora defiende la cabaña celeste en la final que protagonizarán a partir del viernes ante Inter Playa del Carmen.
"Hoy justamente un año estábamos de luto en Tampico. Nos quitaron de nuestros corazones un equipo emblemático y pasional. Quién iba a pensar que meses después resurgiera como un ave fénix e ilusionada más de dos ciudades que anhelan estar en la cúspide del fútbol mexicano. Esta va por ustedes, no tengan duda que daremos todo por regresarles el lugar que les pertenece", dijo el cancerbero.
Millán llegó al entonces TM Futbol Club para el Clausura 2021. Bajo la dirección de Gerardo Espinoza (hoy estratega del Tapatío) alcanzaron una segunda final en tres torneos de la categoría, aunque a diferencia de un año atrás cuando vencieron al Atlante, los Potros de Hierro cobraron revancha y les impidieron un segundo trofeo.
Pese a dicha venta a empresarios tequileros de Jalisco, para llevar al conjunto a Baja California Sur, Marco fue contratado por la directiva del Club Deportivo y Social. Es una de las piezas importantes en los dos torneos en la Liga Premier de la Segunda División, con un subcampeonato pero con el sueño de lograr levantar la copa en esta ocasión.
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Hay un compromiso
Ese es el mismo objetivo que busca el cuerpo técnico que dirige Gastón Obledo. Se acercan el apertura 2022 tras perder con la Universidad Autónoma de Zacatecas reconoció que más allá de la deuda pendiente con la fanaticada, existe un compromiso de darles esa alegría.
"No es una deuda. No dejemos a un lado todo lo bueno que hicieron los jugadores en el torneo anterior y se merecían ser campeones. Es más un compromiso, unas ganas y un deseo el campeonato a esta gran afición con la cual vamos a esta final", indicó el estratega.
La Jaiba Brava encara su onceava final desde la fusión del Tampico FC y los Orinegros de Ciudad Madero en 1981. Ha disputado trofeos en todas las categorías desde Tercera, Segunda y Primera División; su único título en el máximo nivel del balompié nacional fue en 1953, además de dos subcampeonatos en el Prode 85 y México 86.
Fue el primer monarca dentro de la categoría de Plata en 1994 y 2020. Suma en Segunda División tres campeonatos, en 2000, 2001 y 2016.
