Todas las adversidades que ha enfrentado la Jaiba Brava del Tampico-Madero en el Apertura 2025 logra sacarlas adelante. La capacidad de respuesta y sobreponerse a un terreno de juego convertido en lodo, resalta en el empate rescatado al mediodía de este sábado en su visita a los Coyotes de Tlaxcala, duelo válido por la jornada 11.
Son 21 puntos y conservando el invicto, poniéndose a tiro de piedra de volver al superliderato de la Liga de Expansión a media semana, nuevamente con el destino en sus manos no solo de ubicarse en esta posición, también de amarrar en definitiva su pase a la Liguilla. En la primera ocasión que debió reponerse una desventaja respondió, esto en la cancha del Estadio Tlahuicole.
Para cubrir la baja de José Clemente, el cuerpo técnico celeste mandó a Oliver Pérez por la lateral izquierda. Fue la modificación obligada debido a la suspensión.
El rumbo del juego se dió sin rebasar el minuto 5. Dentro de las primeras acciones, se comete una clara mano dentro del área celeste. Pena máxima decretada por el árbitro central Jesús Enrique Herrera, encargándose de la ejecución José Plascencia anunciado al centro de la puerta, pero el intento de detenerlo por Gerardo “Kampa” Ruiz fue insuficiente por la potencia del tiro. La ventana era local por medio de su capitán.
En el resto de las acciones, la voluntad de los porteños en conseguir la igualada no se reflejó en el funcionamiento colectivo. Imprecisos en los toques, en pocas ocasiones lograron inquietar con peligro la meta de Víctor Mendoza, repercutiendo el mal estado de la cancha.
Para la segunda parte, los porteños fueron más insistentes a pesar del flojo terreno de juego. En el 63, Edson Torres estuvo cerca de concretar la paridad a través de un tiro libre que pasó muy cerca del ángulo superior derecho.
El partido tenía ganas de abrirse en el 67 y cerca del segundo quedaron los tlaxcaltecas tras el remate a bocajarro de Hugo Rojas, cacheteándola en el centro del área pero pasó arriba de la puerta visitante.
El merecimiento para los tamaulipecos al ser el insistente en ir al arco rival tuvo recompensa en el 81. Desde la banca vinieron las respuestas para Marco Antonio “Chima” Ruiz y una fue Omar Soto, al combinarse con Misael Pedroza en una pared dentro del área y, tras una finta, sacó un zurdazo poderoso que venció a Mendoza.
Digerida la anotación por ambos bandos, el juego quedó abierto. Marco Fabián decidió mandar sus últimos cartuchos sobre la compensación para revertir el momento, pero faltó capacidad mientras se impuso la solvencia defensiva de los jaibomaderenses.
El resultado pudo ser mejor, pero las circunstancias le dan valor a un punto como mantener la imbatibilidad. Vienen dos encuentros importantes en casa, primero este miércoles ante Mineros de Zacatecas, con la gran opción de recuperar la cima de la categoría.
AA
