Irving Brandon Escobar Cosme, estudiante de la Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), forma parte de la selección nacional que participará en la Copa Mundial de Street Soccer 2025, justa que se desarrollará del 24 de agosto al 1 de septiembre en Oslo, Noruega.
El alumno de noveno semestre de la Licenciatura en Administración de Empresas de la máxima casa de estudios, forma parte del equipo que se coronó campeón nacional en el torneo “De la Calle a la Cancha”, realizado en San Luis Potosí.
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Escobar Cosme formó parte del equipo Lobos de la BUAP, oncena que militó en la segunda división del balompié en México, y ahora cumplirá su sueño de acudir a la justa mundialista avalada por la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA).
El camino al Mundial de Street Soccer
Irving Brandon Escobar Cosme, estudiante de la BUAP, representará a México en la Homeless World Cup 2025, copa mundial que reunirá a los mejores exponentes del llamado street soccer.
Hace seis años, el estudiante incursionó en una modalidad distinta al fútbol común: el street soccer, cuyos equipos están integrados por un máximo de ocho jugadores, pero sólo cuatro pueden estar al mismo tiempo en la cancha; la duración de los partidos se divide en dos tiempos de 7 minutos cada uno, con un intervalo de un minuto entre éstos.
Escobar Cosme obtuvo el llamado para formar parte del equipo representativo de México por ser uno los mejores jugadores durante el torneo “De la Calle a la Cancha”, realizado en San Luis Potosí.
“Estuve en una situación muy vulnerable al momento de perder a mi mamá, hace un año. Justo en el aniversario de su fallecimiento, se me dio la oportunidad de ser convocado a un mundial. Este deporte hizo que no me rindiera en absoluto y ser seleccionado nacional significa mucho para mí: es el sueño de cualquier niño”, expresó el estudiante de la BUAP.
Nunca es tarde para cumplir sueños
El estudiante poblano aseguró que nunca es demasiado tarde para alcanzar los sueños y ahora se prepara para la justa mundialista.
Su pasión por el fútbol inició a los tres años, por influencia de su hermano. A partir de entonces, los entrenamientos y torneos de balompié formaron parte de su vida. A los 16 años debutó en la segunda división de Lobos BUAP y, posteriormente, se incorporó a otros equipos.
“Para mí el deporte significa todo, me ayuda física y mentalmente. En particular, el fútbol me ha ayudado a cambiar mi vida por completo, a ser protector y valorar los esfuerzos de las personas que me rodean”, refirió.
Su aspiración deportiva es ser campeón mundial; mientras que, en el ámbito educativo, trabaja para terminar su carrera. A futuro, no descarta continuar con su preparación académica.
AAC
