Ignacio Solares el novelista, el dramaturgo, el editor, el periodista, fue también un paciente epigramista. Fue, como escribe José Gordon en el prólogo a Minucias (Grijalbo), una selección de las piezas publicadas en El Universal entre 2015 y 2022, y que Solares dejó para su publicación unas semanas antes de su muerte el 24 de agosto de 2023, un “narrador nocturno”. Ese temperamento insomne anima a cada uno de estos “relámpagos verbales”, como Gordon los nombra, herederos de una larga tradición en la que se funden el arrebato poético y la reflexión, la expansión del pensamiento y la concisión verbal. Es dado aventurar que podrían representar la summa de la vida y la obra de Ignacio Solares.
La noche —el intervalo de la creación y del encuentro con las potencias desconocidas— desciende sobre el amor, el sexo, la prefiguración de la muerte, la fe religiosa, el sentido de la vida, la dudosa distinción entre lo tangible y lo imaginado, los mecanismos de la ficción, el sufrimiento, la depresión… Solares dialoga con estos Grandes Temas hasta obtener el milagro de conciliar su doble dimensión: filosófica y literaria.
No debería extrañar que Ignacio Solares cultivara la máxima, la sentencia, el epigrama, el aforismo. Ignacio Solares el novelista aconsejaba el menor número de palabras posible para alcanzar la mayor complejidad estructural y psicológica, Ese era su credo: el estilo literario se hace a fuerza de una concentrada, y suntuosa, austeridad.
¿Qué imagen proyecta Ignacio Solares en estas Minucias? La de quien expresa socarronamente sus dudas, la del perseguidor de zonas donde los misterios ponen los pies en la tierra, el humorista, el que dice: “Lo más cierto es la ficción”.
Es curioso que Minucias no contenga algunas miradas a la fiesta de toros. Curioso porque era una de las pasiones de Ignacio Solares. Así que, sin toros, ni sangre y arena, van estas perlas suyas: “Yo, como Péguy, soy un cristiano sin iglesia”; “Tal vez haya un libro con la clave de mi vida, pero lo leí y no me di cuenta”; “Qué temeridad la del primer hombre que se comió una ostra”; “Qué condena cargar de por vida con una deuda por un crimen que no cometimos”; “A los colchones viejos les salen tumores”; “El insomne tiene reloj de luna”.
Minucias
Ignacio Solares | Grijalbo | México | 2025
AQ