En su disco Vivencias, realizado en 2010, el jazzista Heberto Castillo Juárez rindió homenaje a su padre, el ingeniero Heberto Castillo, con composiciones basadas en las vivencias que el luchador social relata en su libro Si te agarran te van a matar.
Cinco años más tarde, el pianista lleva el homenaje a los escenarios con el espectáculo multimedia Vivencias del 68, que se presentará los días 10 y 17 de diciembre a las 20:00 horas en El Hijo del Cuervo. Además de la música original y los textos de su padre, se incluyen videos de Óscar Menéndez, autor de Dos de octubre, aquí México, uno de los documentales más representativos del movimiento estudiantil de 1968.
Heberto cuenta que algunos avances de este trabajo se presentaron en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara en el área de documental. "El trabajo es muy pesado, pero ha ido creciendo. Yo tenía algo de música, pero tuve que escribir otras piezas para ajustarlas con los videos".
En Vivencias del 68, continúa el músico, "hay una interacción entre los actores, la música y las imágenes. El actor y narrador es Juan Acosta, quien caracteriza a mi papá cuando estaba joven. La caracterización es muy buena y le da el tono al personaje. El espectáculo aborda desde los movimientos sociales de 1958, el movimiento ferrocarrilero, el movimiento médico, el 68 y algunas estampas de 1971".
Entre las imágenes inéditas hay algunas que Menéndez filmó cuando Castillo estaba en el penal de Lecumberri. "Metieron una cámara pequeña de manera clandestina y se filmaron algunas vistas de los presos en el movimiento de 1968, entre ellos mi padre", relata su hijo.
Heberto dice que se habla mucho sobre el 68, "pero no se conoce realmente lo que se pasó en ese movimiento estudiantil y popular. En el espectáculo se ven diferentes secuencias de los movimientos sociales y cómo va llegando el momento en que el sistema no aguanta, que es cuando llega el 68. En los videos se advierte cómo se integraba la gente al movimiento, cómo apoyaban las diferentes universidades y sectores sociales".
Vivencias del 68 es como dar "una versión accesible y amena de un periodo turbulento de la historia —indica el pianista—, pero en la pantalla aparecen testimonios como el momento en que está la balacera en la plaza de Tlatelolco. Es una secuencia muy interesante de todos los eventos, con el actor caracterizando a mi padre y la música original. Esto es parte de la historia del México actual, la de los movimientos sociales que no deben ocultarse".
