La obra de Miguel Bernal Jiménez (Morelia, 1910-León, 1956) resuena en el tiempo por sí misma y gracias al Festival de Música de Morelia, que desde 1989 tributa no solo al compositor sino a músicos mexicanos y extranjeros, jóvenes y consagrados.
La edición 37 del festival se celebrará del 14 al 23 de noviembre, este año con el lema “América suena”.
Verónica Bernal, directora del festival, platica con MILENIO sobre la responsabilidad de estar al frente siendo, además, nieta del reconocido organista y pedagogo.
“Es un gran legado el que hizo mi abuelo como compositor, como director de orquesta, como organista. Lo más importante también es que mi padre, que era empresario, creó el festival hace 37 años. Ya no está con nosotros, pero lo increíble es que el evento ya es un patrimonio no solamente de Michoacán, sino también de México”.
Esto se refleja en los grandes conciertos que el festival ha presentado, pero también en el legado académico. “Para nosotros es un tema importantísimo que los jóvenes de este país puedan mejorar, prepararse más. Hacemos ese puente para que tengan nuevas oportunidades y que se vayan becados a alguna escuela de música en el mundo o que puedan ir a tocar a otros festivales. Ese es un tema que hemos trabajado a lo largo de estos años”.
El gran músico cubano Paquito D’Rivera, el chelista Santiago Cañón (que presentará un espectáculo multimedia porque también es artista plástico), el clavecinista español Yago Mahugo y el flautista Horacio Franco, así como la soprano mexicana María Katzarava y el pianista cubano Ángel Rodríguez son solo algunos artistas que estarán presentes en esta edición del festival.
¿Cómo definen las temáticas anuales?
Tenemos un consejo artístico que entró este año. Está conformado por Juan Alonso Mendoza, director artístico de la Escuela Reina Sofía de Madrid; el maestro Juan Felipe Molano, director de las orquestas del conservatorio de Seattle y sus orquestas juveniles, y la maestra Silvia Santamarina, gran violinista del Cuarteto White y gestora. Ellos decidieron que sería maravilloso que de aquí a los 40 años del festival, en 2028, se dedique cada año a un continente, y concluyeron que qué mejor, con todo lo que estamos viviendo, empezar con las Américas.
Bernal dice que aunque participen agrupaciones como la Orquesta de Cámara de Berlín o la violinista española Leticia Moreno, deben interpretar a compositores de América, como Samuel Barber. “Deben tocar también de mujeres compositoras, algo que empezó desde el año pasado y trabajamos mucho este tema”.
Comenta que el festival no solo resalta la música clásica: “Se propone jazz, música contemporánea, barroca y también otros géneros en las actividades que tenemos al aire libre porque es un tema muy importante para nosotros acercarnos a los jóvenes y a los niños. Es relevante inculcar en ellos el amor a la música de concierto”.
¿Qué retos implica la formación de talento y público infantil?
Es un programa muy lindo, llevamos 11 años haciéndolo con la UNAM, en el campus que tiene en Morelia, donde hay conciertos, talleres, cuentacuentos, literatura y música.
A lo largo del año se presentan coros comunitarios con niñas, niños y jóvenes de escasos recursos y a través de la música su vida ha cambiado, dice Bernal. “Es un programa 100 por 100 en tejido social para que las horas de ocio de nuestros niños y jóvenes sean horas virtuosas. Actualmente tenemos una orquesta, y seguimos trabajando para que a estos niños nadie los toque y no se puedan meter en ningún vicio”.
Bernal dice que han beneficiado a más de 900 familias dando seguimiento a estos chicos. Dice que han buscado que entren a universidades privadas porque sus padres no tuvieron esa oportunidad: “Pensemos que somos el segundo estado con mayor porcentaje de padres que migraron a Estados Unidos, y el tema del abandono y de la ruptura familiar es muy fuerte. A través de la música hemos logrado que estos niños cambien su historia. No importa que sean músicos o no, el tema relevante es que puedan terminar su universidad y que su autoestima sea alta. La música les genera disciplina, trabajo en equipo, pero lo más importante es que a estos chicos el crimen organizado no los toca”.
¿Qué ofrecen este año a los jóvenes músicos mexicanos?
El programa académico que hizo el consejo está muy nutrido, porque Leticia Moreno y Santiago Cañón, por ejemplo, van a dar master classes y hay mucha gente que está inscrita para poder estar en ellas, no solamente son jóvenes de Bellas Artes y del Conservatorio de Morelia, sino también de otros conservatorios del país.
Otro tema es que somos el único festival en el país que tiene un coloquio que se denominó La música en las Américas, una mirada global con investigadores y musicólogos que participarán en mesas redondas.
¿Qué logros han obtenido con los jóvenes?
Muchos chicos que han egresado de aquí han podido tocar en lugares como Viena o Aspen. Hubo un año en el que promovimos a un cuarteto de jóvenes muy talentosos para que fueran al Festival de Música Clásica de Ushuaia en Argentina.
También hacemos contacto no solo con otros festivales, también con otros países. Por ejemplo, en 2026 se cumplen 200 años de relaciones diplomáticas entre Francia y México, y estamos viendo si promovemos que alguna de las agrupaciones icónicas de nuestro país pueda estar presente allá.
Rumbo a los 70 años del fallecimiento del maestro Bernal, se están preparando para que sea una celebración durante todo 2026. “Planeamos un catálogo con 40 de sus obras orales, aunque ahora estamos trabajando con las orquestales. Pensemos que Bernal Jiménez dejó más de 250, de las cuales no se conoce ni una cuarta parte. Es un gran archivo que requiere no solamente recursos sino tiempo, pero estamos en ese camino. Ahora sí que ese adeudo yo lo tengo con mi abuelo”.
hc