Xin Xin, la última panda que habita en la Ciudad de México, rebasó la expectativa de vida de 30 años para un ejemplar de su especie en cautiverio. El 1 de julio cumplió 35 años, lo equivalente a 100 años humanos.
Al tratarse de un ejemplar senil, sufre enfermedades propias de su edad, por lo que se mantiene bajo observación permanente, bajo el cuidado de médicos y especialistas que atienden sus necesidades, lo que ha llevado a su longevidad, señaló Alberto Olascoaga Elizarraráz, director del Centro de Conservación de la Vida Silvestre Chapultepec.
“Los cuidados que se han dado a Xin Xin es estar siempre muy pendiente de su estado de salud, cuidar mucho su alimentación, en todo su entorno estamos haciendo modificaciones al recinto, de acuerdo a lo que ella nos va mostrando.
"Hablando de una panda ya geriatra, necesitamos tener mucho cuidado en cuestiones inherentes a la edad, que pueden ser cuestiones de visión o articulares, que es lo más común en ejemplares geriatras”, dijo el funcionario en entrevista con MILENIO.

¿Qué enfermedades tiene Xin Xin, última panda de México?
Las autoridades de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México han advertido a los capitalinos que Xin Xin está viviendo los últimos años de su vida. Como todo ser vivo de edad avanzada, esta panda también presenta algunas enfermedades que son atendidas por los médicos, cuidadores y especialistas de Chapultepec.
“Tiene problemas de desgaste articular, como cualquier ejemplar geriatra. A veces no es tan activa como otras ocasiones. El panda recordemos que no es tan activo, es una especie que son solitarios, que pasan mucho tiempo descansando, eso también tiene que ver mucho con su fisiología, con su digestión”.
“Es un animal carnívoro anatómicamente, pero herbívoro por hábitos alimenticios, que no cuenta con elementos como los rumiantes o como otros como caballos, otras especies que son herbívoras que tienen una flora impresionante que es la que realmente hace la digestión. Los pandas no cuentan con ella, por eso comen y duermen, por eso es que son de menor actividad”.

Para procurar un mejor estado, debido a sus problemas articulares, el equipo de “panderos”, como se les llama a los cuidadores de pandas, está pendiente de los movimientos de Xin Xin,
“Si hoy le costó un poco de trabajo subir los escalones para llegar a su hamaca, pues los le reducimos la altura, le metemos más escalones, se van modificando las pendientes de las tarimas y pues le damos suplementos alimenticios y también que nos ayudan a mantener sana su aparato digestivo y su flora intestinal”.
Además, Xin Xin ya sufre problemas en sus piezas dentales, por lo que recibe una dieta especial, basada en un 95 por ciento en bambú, que se le entrega en porciones más finas que cuando era joven, y se complementa con un concentrado de frutas y suplementos alimenticios.
“Algunas piezas dentales, su desgaste ya es considerable. Entonces le damos diferentes variedades de bambú, las ramas primarias, ramas secundarias, hay días que le gusta más comer las hojas, hay días que se busca más el tallo primario, entonces, cuidado mucho el grosor, para que no sea tan difícil para ya partirlo y cuando son un poquito gruesos, lo que hacemos es que el cuidador lo trocea para que sea fácil para ella poderlo manipular y consumirlo”.

La hija de la famosa hembra “Tohui” y el macho “Chia Chia”, que hoy es la única panda gigante que habita en toda Latinoamérica, también tiene una afección en los ojos, el "arco senil" un anillo blanquecino o grisáceo que aparece alrededor del borde de la córnea, que generalmente, no es motivo de preocupación y es común en seres vivos seniles.
“Tiene ya este arco senil se le llama, que es una patología del ojo que no le afecta a la visión, pero que sí ya está relacionada a la edad”, indicó el director.

Aún con estas afecciones, el Zoológico de Chapultepec afirma que Xin Xin se encuentra en un buen estado de salud. “Es un ejemplar geriatra, ya 35 años es una edad muy avanzada para un panda gigante”.
“En el mundo existen alrededor de seis pandas que han rebasado los 30 años y Xin es una de ellas. Entonces, el organismo ya se encuentra como en cualquier paciente de edad avanzada, con cuestiones inherentes a la edad, pero se encuentra bien de salud.
"Todo el tiempo estamos observando a través de los cuidadores, del médico veterinario, para hacer cualquier detención temprana de cualquier enfermedad que pueda presentar”.

A Xin no le gusta asolearse mucho
El director del Zoológico de Chapultepec, Alberto Olascoaga Elizarraráz, afirmó que “Xin” como la llama, está haciendo su vida normal en el recinto panda donde ha pasado toda su vida, aunque no le gusta asolearse por mucho tiempo. De ahí que algunas veces se “esconde” de los inquietos visitantes que por estos días acuden por centenares a saludarla.
"Si no quiere estar en el sol, se va al espacio que tiene para resguardarse detrás del bambú que está ahí, en esos momentos luego no lo alcanzamos a ver claramente desde afuera, pero está ahí descansando”, indicó.

Xin Xin representa la esperanza que se tiene de recuperar a su especie en vida silvestre que se encuentra en peligro de extinción, en el cual México, a través del Zoológico de Chapultepec ha aportado experiencia en el cuidado de esta especie en cautiverio.
“Se encuentra bien, pero es un hecho que está en los últimos años de vida. Solamente existe el récord de una de un ejemplar en China que vivió 38 años; su tía murió de 35; tenemos también esa parte de experiencia, de manejo, de cuidados que ha hecho que los últimos pandas que hemos mantenido bajo nuestro cuidado han sido muy longevos”.
El especialista afirmó que entre la década de los 70s y 80s, cuando el zoológico comenzó su programa de cuidados de pandas en México, los ejemplares alcanzaban una vida de 13 a 15 años, y actualmente se considera la expectativa de vida de 30 años; y actualmente, solo existen seis en todo el mundo que han rebasado esa edad, entre ellos, Xin Xin.

HCM