Pescadores del sur de Tamaulipas y norte de Veracruz se están viendo afectados por la reducción de los espacios para desarrollar su actividad tanto en cuerpos de agua de la zona conurbada como de Pueblo Viejo, debido a planes turísticos y deportivos.
Su representante, Abianez Sánchez Gallardo, dio a conocer lo anterior y dijo que no se oponen al desarrollo, pero demandan que se busquen alternativas para que no se les quite el sustento a sus familias, luego de que todavía no logran recuperarse de situaciones complejas que se han vivido en los últimos años.
“La pesca es una actividad emblemática de la región, solo buscamos que se garantice el derecho a realizarla como una forma de llevar el pan a los hogares, se han vivido temporadas difíciles como la crisis hídrica e inundaciones, donde se tuvieron grandes afectaciones y lo que se requiere es que se permita salir adelante sin causar daño a nadie”.
Dijo que tienen menos posibilidades de desarrollar su trabajo porque se les dice que en el sistema lagunario Chairel-Tamesí no deben estar, que se tienen que desplazar, mientras en la costa del norte de Veracruz, específicamente en playa Hermosa, así como en parte del río Pánuco y la laguna de Pueblo Viejo, también les imponen restricciones.
“La Agenda 2030 marca la seguridad alimentaria, y aparece la pesca sustentable como uno de los objetivos del desarrollo, sin embargo, los compañeros pescadores están enfrentando cada vez una mayor reducción de espacios, al quererse imponer un desplazamiento forzado”.
Apunta que la Ley General de Pesca no acota espacios, especies ni horarios
Explicó que se les dice que esos espacios de donde están siendo retirados son para fomentar más el turismo o la pesca deportiva; aclara que jamás se van a oponer al desarrollo de las ciudades de esta región, pero sí necesitan que no se les excluya y se respete su derecho al trabajo.
“Que se busquen soluciones, no rechazamos que se esté promoviendo el turismo o la pesca deportiva, pero que no se desproteja la pesca artesanal, porque son poco más de seis mil familias las que se ven perjudicadas al prohibirse pescar en áreas donde siempre se había hecho”.
Sánchez Gallardo añadió que en vez de impulsarse la pesca artesanal, se complica su labor, a pesar del esfuerzo de los integrantes del sector por cumplir todas las disposiciones legales. Explica que es una economía circular que se vería impactada, porque ellos distribuyen el producto en los puntos de venta tradicionales de la zona.
“Además el turismo y la pesca deportiva solo se dan en ciertas épocas, y nuestro trabajo que es todo el año se ve afectado, ¿nuestras familias qué van a comer? se trata de nuestra gastronomía, ¿qué les vamos a ofrecer a los turistas?, se perdería una gran fuente de alimentación”.
Abianez Sánchez mencionó que también hay situaciones de acoso e intimidación con esos fines de desplazarlos, situación que califica de injusta, pues ellos solo quieren trabajar como lo han hecho toda la vida y de generación en generación.
yc