A lo largo de este fin de semana de Día de Muertos, cientos de familias llegaron al panteón Jardín, ubicado en la colonia ladrillera, en el municipio de Monterrey para recordar a sus seres queridos.
Desde las primeras horas del día, los comerciantes llegaron con la esperanza de tener buenas ventas, pero conforme avanzó la jornada, muchos reconocieron que este año la gente compró menos comida que en años anteriores.
"Más o menos, ha flojeado la gente, el día de ayer más, la gente ha dejado de venir a comparación de otros años", dijo Ricardo, comerciante de espiropapas y churros rellenos.
"Venimos bien preparados, traemos la camioneta llena, se nos quedaron muchas cosas", agregó.
El 2 de noviembre es una de las fechas más importantes para los comerciantes ambulantes. Sin embargo, en esta ocasión, la mayoría coincidió en que las ventas bajaron, especialmente en los puestos de comida.
Algunos lo atribuyen a la situación económica, mientras que otros aseguran que las familias acuden cada vez menos tiempo a los panteones.
"Ha estado más flojo que los años pasados, el año pasado para las 4 ya habíamos terminado y ahorita son las 7 y no terminamos" explicó Azucena, quien vende elotes.
Por otro lado, los vendedores de flores fueron los más beneficiados de la jornada.
Las flores de cempasúchil, las coronas y los arreglos artificiales registraron buenas ventas.
"Más o menos, no nos quejamos, nosotros nos ponemos desde una semana antes porque la gente viene desde antes a arreglar las tumbas, gracias a dios nos fue bien, no tengo de qué quejarme", explico Don Leopoldo, vendedor de arreglos de flores artificiales.
En contraste, los puestos de antojitos, elotes y dulces típicos permanecieron con poca afluencia.
Aun así, muchos decidieron quedarse hasta el anochecer, con la esperanza de que las familias que salían del panteón hicieran alguna compra de última hora.