Más de una vez te habrás planteado la posibilidad de abandonar el gimnasio. Quizás hayas pensado que estás bien así, que no debes preocuparte por mejorar, que has alcanzado un nivel aceptable; es un error, puede que estés a punto de tirar muchos beneficios por la borda.
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1. Perderás masa muscular
El cuerpo se adapta al esfuerzo al que lo sometes, tus fibras musculares no verán la necesidad de permanecer fuertes al punto de soportar cincuenta kilos y la masa muscular de a poco desaparecerá. No será lo mismo que si nunca hubieras levantado cincuenta kilos con regularidad, seguro; haber concurrido al gimnasio y haber dejado por un tiempo de hacerlo es mejor que no haber ido nunca. No permitas que el trabajo de muchos años quede en poco o nada.
2. Perderás capacidad aeróbica
Al querer regresar a hacerlo te cansarás más, además de que tu metabolismo se volverá lento con el tiempo.
3. Perderás energía
Aunque termines cansado, con ganas de llegar a tu casa y quedarte en la cama, siempre estás viendo lo que comes, duermes mejor y tienes más energía para afrontar tus compromisos laborales y familiares. Al no entrenarte, te sentirás permanentemente cansado, desganado, comerás a deshoras y comenzarás a tener problemas de sueño. No dejes que esos malos tiempos vuelvan.
CR