Admítelo, cuando tu mamá o tu abuela te cocinaban galletas no podías resistir la tentación de meter el dedo a la masa y comer un poco de esta y ellas te regañaban, diciendo "no porque te hará daño", pero ahora que tú las preparas ¿quién te detiene?, ¿conoces las consecuencias?
El comer masa de galletas puede enfermarte gracias a una toxina presente en la harina cruda, su nombre es Shiga y está asociada con la bacteria E. coli 0121, según la Administración Federal de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA).
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Esta organización advierte que la masa que se usa para el pan, galletas, pizza o tortillas es peligrosa si se consume cruda ya que la harina se deriva de un cereal producido directamente en el campo, mismo que puede ser contaminado por animales que vivan ahí. Las bacterias mueren cuando se cuece, fríe u hornea la harina.
Si tanto deseas comer masa cruda te arriesgas a enfermar de diarrea, calambres abdominales, malestares que suelen durar menos de una semana pero si se complican pueden afectar los riñones, y producir síndrome urémico hemolítico, lo que podría derivar en insuficiencia renal.
Esto puede ser aún más riesgoso para las personas con un sistema inmune débil, como en los niños menores de cinco años.
¿Se te sigue antojando?
JCH
