La semana pasada, la actriz británica Emma Watson dio mucho de qué hablar en redes sociales con su portada en Vanity Fair, porque la sesión de fotos para la publicación incluía una imagen de la actriz que algunos consideraron topless. En realidad posó con un saco corto de Burberry, pero no traía nada debajo. Todo esto abrió un debate entre los usuarios y algunos asegurar que la actriz no era una verdadera feminista.
Eso sí: la portada, las fotos de la sesión y la actriz lograron estar en boca de todos. Ésta no es la primera vez que una publicación genera controversia para darse a conocer y aumentar sus ventas.
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La polémica sí vende
"La introducción de la controversia puede ser una forma eficaz de ser notado”, comenta Daniel Hennessy, director creativo en Geometry Global Agency U.K. en entrevista con CNBC. "Lo más listo que un anunciante puede hacer es lo contrario de lo que todos los demás están haciendo".
Con esto en mente, las cabezas creativas detrás de las revistas como Rolling Stone, Bloomberg Businessweek, Time y Vanity Fair es lo que siempre buscan: una imagen que encienda ira para poner el tema en boca de todos y, a su vez, obtener más suscriptores.
Las portadas de Bloomberg Businessweek, la de los aviones de United y Continental Airlines que parecen estar teniendo sexo, y su portada con arte fálico, levantaron las ventas y suscripciones de la revista.
"En los últimos dos años, nuestras portadas más controvertidas levantaron en quioscos hasta un 70 por ciento encima del promedio anual", comenta Alec Casey, jefe de circulación de Bloomberg Businessweek en una entrevista con AdAge.
Otra de las portadas que elevó las ventas fue la de Kim Kardashian y Kanye West de Vogue en 2014. Ésta vendió alrededor de 500 mil copias, según la estadística que muestra el sitio web TooFab; lo que sin duda desconcierta al público es la decisión de poner a una de las parejas más sobrevaluadas en todo el mundo y el hecho de que Kim es una estrella de reality show.
Por otra parte, hoy en día, las redes sociales son un gran apoyo para aumentar las ventas.
“Nadie te pedirá que estés en su sitio web como una persona de medios, pero todo el mundo quiere estar en la portada de una revista… cuanto más polémica sea la portada, más se comparte y se habla… ya sean buenas o malas”, dice el Profesor Samir Husni del Magazine Innovation Center de la Escuela de Periodismo en la Universidad de Mississippi, en entrevista con el sitio Flipp.
FM
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