En la escuela primaria de nueva creación de la colonia Unidos Avanzamos se enfrentan diferentes problemáticas, pero la más recurrente es la ausencia de alguno de sus alumnos, pues aunque son menores de edad tienen que trabajar, para apoyar en la economía familiar. La directora ha decidido justificar sus ausencias con tal de que no dejen la escuela.
A la profesora Nidia Chaparro, directora y docente en la escuela de nueva creación, que debido a que presta varios salones para que alumnos de secundaria tomen clases, se ha vuelto multigrado, se le hace un nudo en la garganta cuando habla de la situación de algunos de sus alumnos, los ve tan pequeños, que le parece increíble que ya trabajen.
"En cuestiones sociales la cuestión económica, en lo educativo hay muchas faltas, algunos se van a ayudar a sus papás, tengo niños que ya trabajan, son alrededor de seis niños".
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El que más recuerda es el caso de Cristian del Ángel, pues tiene 11 años, y hace un par de meses su mamá tuvo un trágico accidente en el que se lastimó la columna, y por ahora no pueda caminar.
El menor pedía permiso para retirarse a las 11 de la mañana, y la profesora le pareció muy extraño, pues sólo decía que tenía que ayudar a su mamá, así que tras darle permiso, decidió visitar su casa.
Mayúscula fue su sorpresa cuando al llegar a la calle donde vive, vio al chiquillo cargando un bote de mezcla, con la mochila por un lado y apenas si se había quitado la camisa del uniforme.
"La mamá de uno de mis alumnos tuvo un accidente, me dijo que estaba ayudando a su mamá, me fui a su casa y al llegar a la colonia lo veo trabajando de albañil, tenía la mochila por un lado, se quitó la camisa y llevaba un bote de mezcla, fui a hablar con su mamá y me dijo que sólo eran ella sus dos hijos, y el hermano de Cristian padece de sus facultades mentales".
No es el único caso que tiene en la escuela, pues hay otros cinco niños que trabajan, sin embargo estos trabajan en la pizca de cebolla y chile, por ello cuando es la temporada no van a clases, pues se van con sus papás a trabajar.
La profesora aseguró que no desea que los niños dejen la escuela, por eso les ha dado la oportunidad y les justifican las faltas, pues el objetivo es que sigan asistiendo, pues la temporada de pizca no dura todo el año y las familias requieren del ingreso para subsistir.
JERR
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