Porque no cumplen con los requisitos de los cargos que ostentaban como agentes del Ministerio Público Orientador (Ampos), 22 funcionarios de la Procuraduría de Justicia fueron suspendidos de sus cargos sin goce de sueldo y posiblemente sean dados de baja.
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Todos los Ampos que quedaron separados de sus funciones recibieron sus nombramientos en 2016, cuando inició la nueva administración, aunque la mayoría no cumplía con lo establecido en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Aunque las autoridades manejan con hermetismo las investigaciones que siguen en el caso, trascendió que algunos de esos fiscales orientadores, presuntamente ni siquiera contaban con el título que los respaldara como abogados y fueron asignados a desempeñar funciones en distintos áreas de la dependencia estatal.
Aparentemente, otros falsificaron documentos para cubrir todos los requisitos solicitados.
La suspensión de dicho número de agentes del Ministerio Público Orientadores se suma a la destitución de dos que, hace unas semanas, fueron cesados de sus funciones por cuestiones similares.
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Fuentes allegadas a las acciones irregulares de los Ampos advirtieron que podrían haber incurrido en un delito al igual que él o los superiores que les firmaron los nombramientos con los que estaban operando ilícitamente dentro de la dependencia.
