A pesar de la cancelación de la planta Ford en San Luis Potosí, la industria automotriz mexicana se mantiene como una de las más sólidas del país, por su ubicación geográfica, bajos costos laborales y de operación, además de su apertura y desregulación.
Esta transnacional mantendrá su "inversión de nuestro país y de los mil 600 millones de dólares que iba a desembolsar en SLP, destinara la mitad a expandir el nivel de operaciones y ocupación de sus instalaciones en Sonora, Guanajuato, Chihuahua y Estado de México, para enfrentar a empresas competitivas como las chinas o japonesas debe producir a costos más bajos", sostuvo Angelina Gutiérrez, del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.
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Descartó la posibilidad que empresas transnacionales "estén dispuestas a cancelar sus inversiones y destruir la cadena de producción, distribución y comercialización, básicos para la globalización e integración de países en bloques regionales de industria y comercio".
En su exposición, la académica recurrió a un balance de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), que muestra que México es el principal proveedor externo de vehículos en el mercado estadounidense, con ventas por75 mil millones de dólares.
"La inversión extranjera en el campo automotriz mexicano es uno de los mayores negocios", pues concentra el once por ciento de monto total de la inversión foránea directa (IED) que ha captado el país desde 1999.
La investigadora explicó que según cifras oficiales de la Secretaría de Economía, de cada centenar de dólares de inversión en México para esa rama industrial, 64 se destinan a fábricas de autopartes, 33 por ciento al ensamble de vehículos ligeros y sólo tres por ciento a vehículos pesados.
De cerrarse la conformación de esta cadena internacional de producción vehicular, estas ventajas se perderían y se destruiría el vínculo de producción y servicios tanto en países desarrollados como subdesarrollados.
De hecho, esta disparidad en los costos de manufactura obligó a Ford a instalarse en territorios con mano de obra barata a fin de evitar la bancarrota, señaló.
MCLV