“Sistema Biobolsa fábrica, vende, instala y financia sistemas de bioenergía para pequeños productores en México, Centro y Sudamérica, África e India”, asegura Alexander Eaton, CEO y cofundador, junto a Camilo Pagés.
Los biodigestores reciben todos los desechos orgánicos para convertirlos en biogás y en un potente fertilizante para uso del campo.
“Este sistema es muy completo, pues permite que los pequeños productores sean eficientes, tengan mayores ganancias y produzcan comida sana. Además de contribuir a reducir las emisiones de carbono, desplazar fertilizantes químicos y limitar el cambio climático.
Para su funcionamiento, los biodigestores aprovechan una bacteria que convierte los deshechos en metano y bióxido de carbono, a través de una tecnología patentada por la empresa.
Esta tecnología tiene un costo accesible, que permite instalar cientos de ellos en poco tiempo.
El mercado de Sistema Biobolsa son pequeños productores y granjas. Dos mil millones de personas que trabajan el 60 por ciento de las tierras cultivables en el mundo.
En 2005 Alexander empezó a desarrollar el biodigestor. En 2010, él y Camilo, con experiencia en fabricación industrial, formaron la empresa. Durante cinco años trabajaron en México, se expandieron a Nicaragua, Colombia, Kenia y, este año, llegarán a India.
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Alexander confiesa que han enfrentado muchos retos, que les hicieron ver que necesitaban más que un buen producto. Por eso diseñaron una metodología para introducir y normalizar su uso, así como monitorear el funcionamiento, al paso del tiempo. Otro de los retos fue el financiero, ya que su mercado son personas de bajos recursos; por la naturaleza del negocio, es difícil obtener financiamiento; y el apoyo del gobierno es limitado. Así que crearon una microfinanciera que facilite el pago a los compradores.
Sistema Biobolsa ha ganado muchos reconocimientos, pero Alexander destaca: el segundo lugar de Iniciativa México, en 2011; el Top 10 Emprendedores Latinoamericanos, en 2012; y el Buckminster Fuller Challenge Finalistas, de 2014, recibido en Nueva York.
Sistema Biobolsa lleva 3 años certificada como empresa B. Un proceso que les ha permitido analizar y perfeccionar cada área y trabajo realizado dentro de la empresa: gobernanza, gestión, medio ambiente, modelo de negocio, así como la inclusión de los intereses de empleados y comunidad, para fortalecer una práctica más inclusiva y humana, donde el éxito se mide por el bienestar de personas, sociedad y naturaleza.
“La certificación nos ha dado la oportunidad de mejorar las políticas de recursos humanos, por ejemplo. Además de ganar reconocimiento mundial como una empresa socialmente responsable. No se trata de decir que somos perfectos, sino transmitir la importancia de nuestro trabajo social. Que se comprenda que se puede funcionar, ser rentable y tener impacto social”.
REPL