El coordinador de la fracción parlamentaria de Morena en el Congreso del estado, Ricardo Raúl Baptista González, argumentó que sus compañeros diputados no asistieron a la sesión de este martes debido a la falta de garantías para su bancada y acusó que persiste la intromisión del Ejecutivo en el Poder Legislativo.
Aseguró que el grupo legislativo de Morena volvió a ser objeto de presión y coacción, ya que el gobierno estatal busca –dijo– ejercer su voluntad “pretendiendo pisotear la autonomía Constitucional de esta soberanía”.
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Afirmó que el gobernador del estado, Omar Fayad Meneses, a través de los partidos políticos pretendió imponer sus condiciones con grupos de choque que invadieron el Pleno del Congreso.
Ante ello, agregó que en un ejercicio de prudencia, nuevamente la bancada de Morena decidió no acudir a la sesión.
“Vimos claramente cómo los dirigentes de los partidos políticos subordinados al gobierno se sumaron a la invasión del Pleno de este Congreso faltando el respeto al órgano legislativo con la finalidad de imponer su reforma electoral a modo construida por el Ejecutivo estatal y no con la gente”, sostuvo.
Baptista González puntualizó que el gobierno del estado no acepta ni respeta el mandato ciudadano que la mayoría de los hidalguenses otorgaron a Morena. “Hoy nuevamente persiste la sospecha de que integrantes de esta legislatura pretenden corromperlos con favores políticos y económicos para servir al poder político del PRI”, dijo.
Subrayó que los grupos legislativos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN), Partido Encuentro Social (PES), Partido Nueva Alianza (Panal), Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido del Trabajo (PT) desconocen y violentan el principio básico de cualquier Congreso en el mundo: el respeto a las mayorías.
“Con toda claridad denunciamos el comportamiento hostil del gobierno estatal y sus aliados en contra de cualquier acción legislativa promovida por Morena en el Congreso”, finalizó.
