Ricardo Rubio, doctorando en derecho por la Universidad Panamericana, y ahora vicecoordinador del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN )en el Congreso de la Ciudad de México, aseguró que desde muy joven sintió el llamado a la función pública, pues a los 15 años, inspirado por Diego Fernández de Ceballos, entró al PAN, en donde lleva más de 10 años militando.
Con gusto a la colección de libros 100 mitos de la historia de México de Francisco Martín Moreno, el legislador expresa que admira y le gustaría ser emulado con Belisario Domínguez, al cual calificó de gran orador.
Admirador de Hugo Sánchez, chiva rayada de corazón, y seguidor del rock en español de los ochentas, Ricardo Rubio, de 38 años, cuenta que es cinta negra segundo dan en el karate, y que actualmente se encuentra en el lugar que siempre soñó: ser diputado local en el Congreso capitalino.
¿Quién es Ricardo Rubio?
Soy un ciudadano, padre de familia, hijo, hermano y amigo; soy un abogado de 38 años, una persona comprometida con vocación de servicio a la comunidad, soy un hombre de fe, abogado de profesión, una persona que ha recorrido las calles buscando el mayor beneficio a la comunidad.
¿Cómo fue tu infancia?
Fue una infancia muy bonita, vengo de una familia de cinco, mi mamá, papá, dos hermanitas preciosas a quienes amo profundamente; y vengo de una familia unida, una familia de padres jóvenes, tuve la gracia de tener padres fuertes que aguantaran a un chamaco melindroso, porque creemos que yo padecí de hiperactividad, desde niño fui muy tremendo. La verdad es que yo tengo la fortuna de decir que viví una infancia feliz sin ningún inconveniente, siempre se cuidó mi normal desarrollo psicoemocional, he sido una persona que fue a escuelas de inspiración católica.
¿Qué disfrutaste más de esos años?
A mí me encantaba jugar Mario Kart, con mis primos jugábamos Street Fighter, Mortal Kombat, fui un gamer, de la generación que vio avanzar los videojuegos. Estoy como que el pasado y el presente, vengo de ambos mundos.
¿Cómo fue tu llamado a la política?
Quiero decirte que desde muy joven sentí el llamado a la función pública, a mí me invita un amigo antes del año 2000 a reuniones del PAN, estando yo en la prepa a los 15 años de edad, empecé a ir, me empezó a llamar la atención desde muy joven.
Existía un programa que se llamaba partidos políticos y yo lo veía, era el único niño loco que veía el programa y recuerdo la campaña presidencial de Diego Fernández de Ceballos en el 94; me acuerdo bien cuando mataron a Colosio, era un sábado en la tarde y vimos la noticia, y esas cosas se fueron quedando en mi para iniciar en la política.
¿Qué te gusta más de la vida?
Definitivamente disfrutar con mi hija, mi esposa, la familia, los amigos... Yo he empezado de unos años para acá a apartarme de la materialización, yo creo que la convivencia es muy importante, me gusta mucho viajar, planear viajes con los amigos, con la familia. Me gusta ayudar a los vecinos, hago muchos recorridos y videodenuncias para resolver las problemáticas.
¿Cómo te quita el chip de político llegando a casa?
Es difícil quitarte el saco porque obviamente en el seno familiar te preguntan cómo te fue, y tienes que decirles. Es una cuestión con la que hace mucho tiempo he lidiado, te acostumbras y lo haces con gusto y más cuando te apasiona, no hay problema. Hay veces en donde me dice mi esposa: 'Ya deja de hablar de política'. Y empiezo a dar el parte de lo sucedido, tengo que dar dos partes: en mi casa y en la de mis papás. A veces es difícil la línea de olvidarte del trabajo, porque debes de estar pendiente de lo que los vecinos requieren.
¿Tienes alguna inspiración?
Yo entré al PAN inspirado por Diego Fernández de Ceballos, me gusta mucho la buena oratoria. Pero yo creo que el máximo modelo a seguir que yo tengo es Manuel Gómez Morín, fundador del PAN, para mí es una estrella a seguir, casi sagrado.
¿Con quién te gustaría ser comparado?
Quisiera yo ser emulado a don Belisario Domínguez, gran orador senador que por ejercer la libertad de expresión le cortaron la lengua, pero fue brillantísimo, hablaba con toda la elocuencia que convencía a través de la palabra, me gustaría dejar un legado de buen orador y de alguien que genera buenos consensos.
¿Cuál es tu libro favorito?
Tengo varios, a mi me gusta mucho Francisco Martin Moreno, 100 mitos de la historia de México, tiene volumen 1 y 2, está muy bueno. Es un libro que te habla de algunas cuestiones que han dicho pero están documentadas que fueron de otras forma, de la historia mexicana.
¿Tienes hobbies?
Yo hice karate mucho tiempo, soy cinta negra segundo dan, mi papá me enseñó karate desde que tengo cinco años, pero ya después, en la adolescencia, cuando empecé a hacer pesas, me gustó mucho, porque vas a tu ritmo, te pones tu musiquita y está a todo dar. Me gusta mucho el deporte individual, siento que es como algo sagrado.
¿A qué equipo de futbol sigues?
Le voy a las Chivas rayadas del Guadalajara, que no nos ha ido tan bien; pero le voy por mi papá, que es de Nayarit, y entonces no nos quedaba más que irle a las Chivas, que es un equipo con puros mexicanos y soy chiva de corazón.
¿Jugador favorito?
Hugo Sánchez, yo crecí con él, y creo que hasta la fecha nadie le ha llegado como futbolista mexicano.
Te recomendamos
¿Música favorita?
Me gusta mucho la música de Aleks Syntek, ya no ha hecho gran cosa, me gusta el pop, me gusta mucho el rock en español de los 80.
¿Canción favorita?
La canción obsesión de Miguel Mateos es mi favorita, la canto y la canto cada vez que puedo en los karaokes.
¿Tienes gustos culposos?
La verdad sí, hay unas rolas de reggaetón que sí me gustan, la neta. De repente sí tengo una que otra 'guapachosa', la de la paloma palomita, una que otra de guaracha y reggaetón, ya cuando estas sacándole brillo al tacón salen estas rolitas culposonas.
¿Comida favorita?
Definitivamente los tacos de bisteck con tocino, me encanta, los tacos de pastor y los chiles en nogada.
¿Cocinas?
Yo no soy bueno para cocinar, pero sí de repente me pongo a hacer dos que tres cositas. Me gusta hacer asado nocturno con una cervecita, aunque me gustaría aprender a cocinar.
¿Netflix o cine?
Ir al cine, definitivamente, me gusta mucho ver el cine de acción, las películas de balazos, los carros, rápido y furioso, porque veo algo que me aburre y en dos segundos me duermo.
¿Tienes vida nocturna?
Tuve una vida nocturna intensa, anduve yo en todos los antros y bares de moda en la Ciudad, en la universidad, en la maestría todavía. Ahorita ya le he bajado mucho porque, primero, el tema de la pandemia. De repente sí llego a ir con mi esposa, nos gusta mucho bailar, ya no aguanto tanto, me gusta más platicar, y sí me gusta de repente salir por la noche, pero al cine, y echar el cotorreo con los cuates en una cantina, donde se pueda platicar.
EHR
