Los directores responsables de obra son innecesarios, consideró la legislatura anterior, al dar trámite a una propuesta del Ejecutivo Local para desaparecerlos.
Se citó que fue el 9 de enero de 2019 cuando se publicó en el Periódico Oficial del Estado, el Decreto LXIII-717 mediante el cual se reformaron y adicionaron diversas disposiciones de la Ley de Obras Públicas y Servicios relacionados con las mismas, creándose la referida figura.
¿Qué es un responsable de obra?
Se definió como la persona física auxiliar de la administración, con autorización y registro otorgado por la Secretaría de Obras Públicas del Gobierno de Tamaulipas, con la atribución de ordenar y hacer valer en la obra, la observancia del reglamento de construcciones y demás disposiciones aplicables, incluyendo las ambientales.
Joaquín Hernández Correa, siendo integrante de la pasada legislatura, dijo que cada obra debía contar con un director responsable, y este se encargaría de la licencia en una construcción, verificación de calidad de la obra, visto bueno de operación y seguridad de un inmueble, entre otras atribuciones.
Sin embargo, afirmó que no se estaba cumpliendo con ello y no había un mecanismo que garantizara su total participación dentro del proceso constructivo. Por ello, aseguró que “los directores responsables de obra y corresponsables son innecesarios y representan un costo excesivo ante la obra pública”.
Lo anterior, agregó, debido a que ya se cuenta con la figura de residente de obra, designado por las dependencias, entidades y ayuntamientos, y es quien funge como su representante ante el contratista, siendo responsable directo de la supervisión, vigilancia y control de los trabajos a ejecutar.
Tareas que, dijo, “evidentemente se duplican con el director responsable de obra y corresponsables en el artículo 19 quinquies y el 19 octies respectivamente”, por lo que se propuso y aprobó la derogación de la figura en la obra pública.
SJHN
