El coordinador del PRD en la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles, negó la existencia de algún compromiso para discutir y aprobar las leyes secundarias en materia energética antes de finalizar junio, como lo perfiló ayer su homólogo priista Manlio Fabio Beltrones.
Demandó así una discusión amplia y transparente, con la participación de los sectores involucrados en el tema, sin que ello signifique la proliferación de foros.
Aureoles subrayó, además, que su bancada no está de acuerdo con que se “empate” la discusión de las leyes secundarias en materia energética con los partidos del Mundial.
“Esa es una estrategia de otros, no nuestra, y por eso no hay ninguna ruta establecida en materia de energía, ni siquiera en telecomunicaciones, dijimos que la segunda quincena de junio, pero va a estar en función de que el Senado tenga el dictamen correspondiente”, indicó.
El legislador michoacano recordó que la Junta de Coordinación Política acordó dejar en manos de las comisiones dictaminadoras la decisión sobre su calendario de trabajo, mecanismos de discusión y plazos para desahogar las iniciativas, pero sin fijar fechas por anticipado.
“En el tema de energía, ¡nada! Firmamos un acuerdo que faculta a la Comisión de Energía a convocarse y a trazar su ruta, su calendario y a establecer el método que considere pertinente, pero no establecimos tampoco ningún calendario”, remarcó.
En conferencia de prensa en el Palacio de San Lázaro, Aureoles se refirió a la posibilidad de que diputados y senadores del PRI hayan previsto ya una ruta para la discusión de la reforma energética, pero atajó: “nosotros lo que queremos es que se den los espacios suficientes para que haya la discusión de a de veras de los temas”.
Por separado, el también legislador perredista Carol Altamirano alertó sobre el escenario de que el dictamen de las leyes secundarias en materia energética se aceleren después de una pasarela de funcionarios y justo cuando la atención pública esté en el Campeonato Mundial de futbol.
Ello, “con toda la mala maña de aprovechar los tiempos para disminuir la presión social y votar las modificaciones”, acusó.
Según dijo Altamirano, en política nada es coincidencia y mucho menos cuando se trata de negocios multimillonarios: “No seamos ingenuos, es evidente que el PRI prefiere que la discusión se haga de manera que el proyecto del gobierno no sea exhibido, ni reciba críticas”.
