El incendio en el Puesto Central de Control del Metro, donde falleció una oficial de la Policía Bancaria e Industrial y algunos trabajadores resultaron heridos, ocasionó fallas en el Sistema de Transporte Colectivo, que ahora sólo prevé un funcionamiento en las líneas 4, 5 y 6 en las próximas horas; dejó además daños estructurales visibles en el lugar donde ocurrió el siniestro.
La magnitud del evento arrasó a su paso con vidrios, sillas, cables e incluso un equipo de radiocomunicación adquirido durante la gestión de Miguel Ángel Mancera en 2013.
Imágenes de las subestación Buen Tono, tras los hechos, muestran los daños como caída de muebles, vidrios rotos, sillas quemadas, cables quemados, un ambiente lleno de polvo que jamás indicaría que antes hubo cientos de trabajadores en el sitio.
El último reporte indicó que "La falta de una chaveta y no cambiar el aceite a uno de los cinco transformadores de 85 KV que suministran de energía a las seis líneas más antiguas de la red del Metro, fue lo que provocó el fuego en el Puesto Central de Control".
Ante la falta en el servicio del Metro, el gobierno capitalino implementó una serie de rutas en RTP que suplen temporalmente los traslados que realiza el transporte afectado, sin embargo, usuarios reportan largas filas de espera y tiempos de trayectos.
FS
