En 2012, el gobierno de Estados Unidos invirtió 18 mil millones de dólares en actividades de control migratorio, por encima de gastos realizados en otras agencias federales como FBI, DEA y la CIA quienes abrían gastado 14 mil millones de dólares, informó el Instituto para las Mujeres en la Migración (IMUMI).
Además cada año el gobierno del país vecino deporta a 400 mil migrantes de los cuales el 72 por ciento de ellos, mexicanos.
Gretchen Kuhner, directora de IMUMI, indicó que el año pasado 293 mil 966 mexicanos fueron deportados, de las cuales 31 mil 540 son mujeres, además de que el 95 por ciento de las deportaciones son a países como México, El Salvador, Honduras y Guatemala, principalmente.
De acuerdo con el informe ¿Ahora hacia dónde? durante el 2012 de los 400 mil migrantes expulsados 152 mil 426 fueron padres o madres de niños estadounidenses.
Explicó que un gran número de menores de edad que fueron separados de sus padres están ahora bajo custodia de las autoridades estadounidenses, quienes pueden en cualquier momento darlos en adopción en dicho país.
Asimismo, señaló que es común que quienes lograron viajar al país de origen de sus padres enfrenten obstáculos para recibir servicios de salud o educación por los problemas que se registran con su documentación.
"Después de una deportación las familias requieren del apoyo para animarse, seguir adelante y superar obstáculos comía la burocracia, los procesos costosos y frustrantes, dificultades de adaptación y reinserción", dijo.
