El presidente municipal de Singuilucan, Marcos Miguel Taboada Vargas, informó que el 5 por ciento de la población en el municipio aún se dedica a vender combustible en sus hogares, pese a la vigilancia que actualmente existe en la demarcación para controlar este ilícito.
Señaló que las acciones que se han impulsado para detener el huachicol, aún hay personas que se arriesgan a ser parte de esta actividad que, años atrás, era normalizada en el municipio.
“Anteriormente era una actividad normal que se venía realizando, hasta las amas de casa vendían y la vigilancia ha provocado que disminuya considerablemente, y cinco por ciento de la población se dedica aún a esta actividad ilícita.
Era normalizado estar vendiendo el combustible hasta afuera de sus casas, de forma visible, porque lo veían normal, muy natural, pero esta situación ha ido disminuyendo y la gente se ha convencido de que esta es una actividad ilícita, porque se negaban a escuchar y pues hasta comentaban que afectaban sus economías cuando se les invitaba a no vender el combustible”, dijo.
Expuso que, ante las acciones realizadas desde el gobierno federal, estatal y municipal dirigidas al combate del robo de combustible, la sociedad y, sobre todo las personas que se dedicaban a la venta, se han dado cuenta que la inseguridad ha disminuido en el municipio, “y esto es lo que ha detenido un poco la situación, y no se quieren ver involucrados en temas legales, y es lo que ha hecho reaccionar a la gente”, expuso.
En esta línea, garantizó que la seguridad se ha reforzado, y se ha tenido mayor coordinación con la policía estatal, así como con la Guardia Nacional, “y en estas últimas semanas se han detectado bodegas donde se almacenaba el hidrocarburo robado y estamos tratando de combatir este tema para que haya mejor seguridad en el municipio.
“La coordinación para hacer los rondines ha ayudado mucho entre la Guardia Nacional, y fuerza estatal y municipal que han logrado detectar este tipo de depósitos”, refirió.
Hace un par de días, alrededor de seis mil 700 litros de combustible y cinco unidades ocupadas presuntamente para su distribución, fueron asegurados por efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), quedando a disposición Fiscalía General de la República (FGR) para las investigaciones.