La desaparición del Seguro Popular y la entrada en vigor del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi) generó preocupación entre pacientes que reciben tratamiento gratuito de cáncer y cuya póliza esta por vencerse.
Guadalupe Ortiz, paciente del Instituto Nacional de Cancerología, refirió que desde diciembre ha sufrido desabasto de su última quimioterapia, “me dieron todo a medias” y ahora está por vencerse su póliza del Seguro Popular con la que obtenía el tratamiento gratuito.
“No sé lo que me espera para los siguientes tratamientos. Con la desaparición del Seguro Popular desaparecen todos mis beneficios y aún me faltan 16 radioterapias y una operación más. Todo está incierto. No se si me lo van a cubrir, porque antes no pagaba nada”, comentó la paciente.
En un recorrido efectuado por los institutos nacionales de Cancerología, de Enfermedades Respiratorias, de Nutrición, así como el Hospital General de México y Geo González, se detectó falta de información de cómo opera el Insabi y la forma en la que la gente podrá acceder a los beneficios de tratamientos gratuitos.
Graciela Hernández paciente con cáncer, refirió que resulta absurdo hablar de gratuidad cuando para hacerle estudios a su hermana María Cristina, gastaron más de 2 mil pesos por una mastografía, jeringa, y biopsia
“Se supone que no debemos pagar; eso dijo el presidente. Yo no alcancé a afiliarme al Seguro Popular y debo pagar todo mi tratamiento. Eso no lo veo justo, cuando se nos dijo otra cosa”.
Por su parte, Esperanza Hernández, familiar de Joel Toledo, quien cursa con un problema de una infección renal, refirió que “ya no necesitamos palancas para poder ser atendidos; antiguamente era muy difícil que te atendieran en el Hospital Geo González”.
“Con la gratuidad sentimos que contamos con especialistas que ofrecen un trato digno, antes era muy difícil entrar al hospital, pero lo trajimos y de inmediato lo atendieron. No pusieron pretextos”, añadió
Alma Delia Villabarrazas, esposa de Jaime Abel Moreno Fuentes, refirió que hace tres años ingreso al Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) a su hijo con influenza y le cobraron más de 500 pesos por tratamiento.
“Mi esposo desde que llegó, luego, luego, lo atendieron. Lo pasaron a observación y en la noche a piso. De entrada nos cobraron por lo de urgencias mil 600, pero se me hizo poco por todo lo que le hicieron, radiografía, toma de sangre, oxígeno, y atención médica. Por día, hasta ayer llevaba 295 pesos porque me dieron el nivel 1”, precisó.
Pero para Eva Uribe, la buena atención en el INER, significa pagar casi mil 500 pesos diarios por medicamentos, oxígeno y toda la atención.
“Hay algunos que si los tuvimos que comprar, pero la mayoría los tienen”.
Clemente Santiago de Jesús, padre de Enrique, de 40 años, comentó que por dos días ya se subió el monto a 5 mil 133.
“Vamos a tratar de conseguirlo prestado, a ver qué otra opción tenemos. Por el momento se le está pidiendo a la trabajadora social que nos dé la oportunidad de 2, 3 o 4 días, hasta reunir ese dinero. Sabemos que está en terapia intensiva y que esos 5 mil pesos son poco, pero mi hijo gana por viajes, es operador de tráiler”.
kvd